Desde la llegada de Víctor Fernández, el Real Zaragoza está desplegando un fútbol vistoso y efectivo. El equipo aragonés en los nueve partidos con el técnico aragonés, en todos excepto en dos, Osasuna y Oviedo, que estuvo al cincuenta por ciento, en los demás ha tenido más posesión de balón que el rival.
El equipo aragonés ha plantado cara a todos los rivales con los que se ha enfrentado en las últimas nueve jornadas. Entre ellos rivales de entidad como el Málaga, Sporting de Gijón, Las Palmas, Albacete y Osasuna. Quizás el ejemplo más claro de este dominio en el juego fue frente al Málaga en La Romareda, el conjunto blanquillo desplegó un sensacional fútbol combinativo que asedió al conjunto andaluz durante todo el partido. La derrota vino otra vez, por la falta de aciertos en las áreas, el verdadero problema del Real Zaragoza.
Frente al Málaga, el cuadro aragonés tuvo el 67% de la posesión frente al 33% del conjunto malagueño. Lo que está claro, que tanta posesión no sirve de nada, si arriba no marcas las ocasiones que tienes y más en una categoría tan reñida como es la Segunda división.
Pero aún así, el juego que ha implementado Víctor en este equipo no es nada fácil de realizar, y la mayoría de equipos prefieren un juego más directo y conservador. El llevar el peso del partido y el control casi total del juego es algo a la altura de muy pocos, y en Segunda división el fútbol bonito parece no tener mucha cabida.
Lo que está claro, que este fútbol está llevando al equipo a cosechar buenos resultados y en cuanto, se solucione la falta de gol, jugando de esta manera, ya lo dijo el técnico zaragocista en rueda de prensa, el equipo perderá muy pocos partidos.