Antes del inicio de la temporada, pocos habrían imaginado la situación que atraviesa el Real Zaragoza, que tras 36 jornadas de LaLiga 1|2|3 es decimoséptimo clasificado, cinco puntos por encima del descenso. Una posición que según Borja Iglesias, "no se corresponde" con lo que su exequipo ha demostrado sobre el verde.
"He visto partidos en los que ha generado ocasiones y ha dominado el juego. Ha sufrido porque LaLiga 1|2|3 es muy competitiva, pero muchos encuentros merecía llevárselos y no lo ha hecho. Eso le ha penalizado", señalaba el atacante gallego, que en la campaña actual golea con la elástica del Espanyol, en una entrevista a El Periódico de Aragón.
"La temporada pasada demostramos que la idea era muy buena, que teníamos un equipo que podía competir y fue una pena que no se culminara con el ascenso, porque tal y como llegamos al final había que aprovecharlo. Y no fuimos capaces. Este año se empezó bien, jugando al fútbol, con las ideas claras y siendo capaces de ir a Oviedo y ganar 0-4. Pero después se giraron las cosas, entraron las dudas, los cambios de entrenador y es difícil explicar todo. Yo, desde luego, no le encuentro esa explicación", añadía.
Y es que en la capital aragonesa viven con el miedo a un posible descenso a la categoría de bronce, algo que sería uno de los mayores fracasos de la historia de la entidad. Sin embargo, Borja Iglesias lo tiene claro: "El Real Zaragoza se salva seguro, lo tengo clarísimo. Ni un ápice de duda. Le ha tocado vivir esta situación complicada y ahora es momento de que todos, desde donde podamos, aportemos todo lo que esté en nuestra mano", aseguraba.
Por último, cuestionado por lo que dijo cuando abandonó el club, que algún día le gustaría volver al Real Zaragoza, el gallego mantiene su opinión: "Cada semana me llegan mensajes de aficionados, de gente que conozco, diciéndome que me echan de menos o que vuelva. Y lo agradezco mucho, porque yo en cierto modo también echo al Real Zaragoza de menos, por ese sentimiento tan fuerte y por todo lo que viví allí. Eso no quita, claro está, para ser muy feliz en el Espanyol. Sigo pensando igual. Es muy difícil cuadrar todo en el tiempo, pero es algo que deseo", sentenciaba.
No se salva ni de coña, menudo calendario le queda