El entrenador del Real Zaragoza, Víctor Fernández, ha reconocido que la venta del mediapunta Pep Biel al FC Copenhagen le pilló "descolado" porque no era un escenario que estuviera previsto, pero también es consciente de que en la situación actual de la entidad es necesario buscar un equilibrio entre el tema deportivo y el económico.
"La solución del Real Zaragoza no pasa por vender a Pep Biel, pasa por estar en Primera división", ha dicho en su comparecencia previa a la disputa este miércoles del XLIX Trofeo Ciudad de Zaragoza-Memorial Carlos Lapetra.
No obstante, ha argumentado que lo más importante es la supervivencia de la sociedad aunque las decisiones de ese "calado van acompañadas del debilitamiento del proyecto deportivo porque te desprendes de tus mejores futbolistas".
En ese sentido su apuesta, en un mercado en el que otros no tienen la necesidad de vender a sus mejores jugadores, es clara: "En un estado de necesidad tenemos que agudizar nuestro ingenio".
Víctor Fernández ha reconocido que la ilusión de los aficionados del Real Zaragoza es "libre" y pasa por regresar a la máxima categoría, tras un periplo que este año inicia su séptima temporada en Segunda división, pero para conseguirlo ha asegurado que tienen que "racionalizar las ilusiones, porque de la ilusión podemos pasar a ser unos ilusos".
"Estoy superilusionado y más tranquilo que hace unos días. Estoy convencido de que en la ciudad van a ocurrir cosas muy importantes sin alejarme de la realidad", ha afirmado.
Por todo ello ha reivindicado que no hay que perder la ilusión pero se precisa "bajar el volumen del altavoz y el ruido, y que suenen las trompetas más suaves que ya habrá tiempo de que suenen más fuertes. Hay grupo humano fantástico pero y hay liberarlos de una presión innecesaria e injusta".
En cuanto a la confección de la plantilla ha asegurado que está "muy conforme con lo que se ha hecho", a pesar de que el vacío que dejado la salida de Biel es "lo primero que hay que cubrir" dado que en la plantilla no cuentan con ningún otro jugador con características similares.
"En el resto se ha hecho un buen diagnóstico de lo que necesitaba el equipo, aunque las medidas no son fáciles, pero la plantilla no está cerrada ni en entradas ni en salidas. Vamos un pelín más lentos de lo que esperaba, pero la estructura básica del grupo ya está. Tenemos mejor equipo que la temporada pasada y lo que tenemos que hacer ahora es demostrarlo", ha apuntado.
Respecto al partido contra el Alavés ha indicado que lo afrontarán de la misma manera que lo han hecho en los cinco partidos que ya han jugado esta pretemporada, con el mismo rigor y seriedad.
"Es una prueba más contra un rival muy exigente que nos va a dar información para configurar el once de la primera jornada. Nos presentamos ante nuestra afición y estamos obligados a dar una buena imagen", ha concluido.