La garra de Luis Suárez hace justicia ante un Elche peleón
El ambiente de La Romareda invitaba a un gran inicio y el Real Zaragoza lo aceptó protagonizando una salida espectacular. Con llegadas y ocasiones claras, la primer aun cabezazo de Luis Suárez a centro de Nieto, que no encontró portería. El colombiano era una pesadilla para la defensa del Elche y conectó otro disparo envenenado que atrapó Badía. Dwamena también aparecía, pero con menos mordiente. Un disparo flojo y un libre directo que se marchó alto fue su bagaje. El ghanés fue victima de los constantes agarrones de los rivales, permitidos por un Areces Franco que hizo un arbitraje demencial.
El Zaragoza seguía a lo suyo con los dos cambios que hizo Víctor Fernández en el once como mejores asistidores del equipo. Eguaras encontraba huecos y Clemente sacaba el balón desde atrás con criterio. De nuevo, Luis Suárez probó a Badía, en esta ocasión con un gran derechazo pegado a la base del poste, que sacó el portero con dificultad. Con ese flujo ofensivo debería haber sido suficiente para ir por delante en el marcador, pero faltaba puntería. Atienza remató con jerarquía un saque de esquina y tampoco encontró puerta.
Los locales bajaron un poco el ritmo y el Elche intentó estirarse, pero sin mucho criterio. Aún con todo, pudieron marcar en un par de acciones aisladas. Así transcurrieron los primeros 45 minutos, con mayores méritos blanquillos y con el show de Areces Franco, que enervó a la afición, a Víctor, a todo el banquillo y hasta al calmado Kagawa, que se enfrentó cabeza con cabeza con el trencilla.
El partido siguió el mismo guión en la segunda mitad. El Zaragoza atacaba, pero no concretaba sus ocasiones ante un Elche que se defendía con uñas y dientes y que se dedicaba a perder el tiempo en cada acción. Luis Suárez seguía rematando todo lo que le llegaba y Nieto pudo marcar en un saque de esquina en el que no se esperó el balón.
Kagawa estaba muy gris y Víctor le dio recambio con un Papunashvili inédito en esta temporada. Había que derribar la muralla ilicitana como fuera. Clemente remató un balón en otro córner favorable, pero se fue manso a las manos de Badía. El duelo se estaba agotando apenas sin jugarse y llegó una acción personal de Luis Suárez en la que provocó un penalti que, Areces Franco no vio y tuvo que señalarlo el VAR. El colombiano lo anotó haciendo justicia a su buen partido. Salió agotado y ovacionado.
Costó mucho ganar a un Elche que peleó hasta la extenuación. El Zaragoza jugó bien, pero debe aprovechar mejor sus ocasiones. Con ese balance ofensivo, tendría que servir para dominar también el marcador con más holgura, Pero fueron tres puntos de oro y los blanquillos ya suman siete.