Jugar sin público era uno de los grandes temores de los equipos en la vuelta de LaLiga. Una circunstancia que se venía anunciando en Alemania, podía cambiar por completo la visión del fútbol. Tras apenas dos partidos, LaLiga SmartBank ha demostrado la importancia de los campos vacíos y la desaparición de la ventaja de jugar como local.
Así se refleja en los números que arrojan las dos primeras jornadas disputadas en la división de plata del fútbol español. 22 partidos disputados que arrojan unas cifras difícilmente asumibles en otras condiciones que no sea lo extraordinario de la actual. Y es que tan sólo se han conseguido cuatro victorias en campo propio. En la jornada 32 lo logró el Fuenlabrada frente al Tenerife (1-0) y el Mirandés frente al Numancia (2-1) y en la 33 hicieron lo propio la Ponferradina ante el Elche (2-1) y el Rayo frente al Fuenlabrada (1-0). Además, se han sumado 7 empates y nada menos que 10 victorias visitantes.
Los datos de esta nueva realidad contrastan con lo sucedido justo antes del parón. Sirvan como ejemplo las dos últimas jornadas previas a la detención de la competición. Entonces, en 22 partidos se sumaron 8 victorias locales, 8 empates y 6 victorias visitantes. De hecho, en la jornada 30, tan sólo hubo un triunfo a domicilio, el del Alcorcón en Fuenlabrada (3-4).
Un cambio de tendencia que, por cierto, no se ve reflejado en LaLiga Santander. En la máxima categoría se han disputado 20 partidos con 8 victorias locales, 8 empates y 4 victorias visitantes. Una muestra más de la competitividad y la dificultad que encierra LaLiga SmartBank, especialmente para equipos que disfrutan en su feudo como el Real Zaragoza.