El Real Zaragoza vive en una situación de parálisis ante un proceso de compraventa que no acaba de fructificar. Una situación que afecta tanto a lo deportivo, donde se ha incorporado uni único jugador, como en lo institucional, con elementos atípicos a estas alturas de año, como la ausencia de la campaña de abonados o de conocer la camiseta principal de la próxima temporada.
Ante esta problemática se requieren soluciones de urgencia, especialmente ante la inmimencia del regreso al estadio de La Romareda, tanto en el Memorial Carlos Lapetra como en el Primer encuentro liguero, frente al Ibiza. La solución, por el momento, parece pasar por premiar la fidelidad de los que fueron socios la pasada temporada, en la que apenas pudo acudirse al coliseo zaragozano para algún partido del juvenil y del Deportivo Aragón.
Así pues, el estadio de La Romareda se abrirá el próximo 4 de agosto para el partido frente al Getafe para aquellos aficionados que fueron socios del Real Zaragoza durante el curso 2020/21. Eso sí, no se conoce hasta la fecha cual será el aforo permitido, que se mantiene pendiente de las medidas que adopte el Gobierno de Aragón durante los próximos días.
Una fórmula, similar a la utilizada en las ocasiones ya reseñadas, para los últimos partidos de la pasada campaña del juvenil de DHJ y del Deportivo Aragón, que bien podría repetirse nuevamente también en el inicio liguero en el caso de no acabar de concretarse la venta y seguir pendiente la campaña de abonados.