El Almería cumple la lógica ante un Real Zaragoza inferior

Nada más complicado en LaLiga SmartBank que ganar al Almería en el Juegos Mediterráneos. Una empresa complicada, imposible hasta la fecha, pero que el Real Zaragoza no se atrevió a desafiar. Los aragoneses esperaron un milagro con una notable falta de ambición que puso, ni cerca, la posibilidad de lograr algo positivo en tierras andaluzas.

Le tocaba sufrir al Real Zaragoza en el inicio. Con el Almería como dueño y señor de la posesión del esférico, los aragoneses apenas podían achicar agua y alejar el balón de los dominios de Cristian Álvarez. Poco a poco, ejecutando la presión en campo contrario y encontrando profundidad en Fran Gámez, los aragoneses se estiraban para comenzar a tener ocasiones, aunque sin excesivo acierto en los metros finales.

De ritmo cansino y perdido en la imprecisión, el partido entraba en una fase de poca actividad en el que el Real Zaragoza comenzaba a sufrir. Entre errores propios y los fogonazos de talento del equipo almerinese, se sucedían las ocasiones para el conjunto local. Hasta tres en los cinco minutos previos a llegar a la media hora de encuentro. De vuelta al sopor, no serían hasta los minutos finales de la primera mitad cuando despertara nuevamente el Almería, que volvía a gozar de dos buenas ocasiones, nuevamente sin acierto.

Y de la misma forma que acabó la primera empezó la segunda parte, con una ocasión clara de los locales, con un disparo de Portillo que se marchó a las nubes. Anticipo del asedio que se iniciaba durante los siguientes minutos, con otro puñado de ocasiones clara para el Almería, mientras los banquillos apenas podían otear el horizonte más allá de su propio campo.

Con el gol de Sadiq, el Real Zaragoza acabó por deshacerse

Precisamente cuando parecía querer estirarse el Real Zaragoza llegó el gol de Sadiq. Una falta de entendimiento entre Francés y Cristian le ofrecía la oportunidad al nigeriano de anotar sin oposición para poner el 0-1 en el electrónico a la hora de juego.

Tras encajar, los de Juan Ignacio Martínez dieron un paso adelante, tratando de dominar la posesión pero sin inquietar en exceso la portería de Fernando. En el lado contrario, las contras del Almería, sin acabar de definirse, parecían encontrarse más cerca del gol que los intentos del Real Zaragoza.

Y así llegó el segundo. Un balón largo en profundidad a la velocidad de Ramazani, que se inventaba un taconazo para regalarle una asistencia de gol a Pozo, que batía sin dificultad Cristian para sellar la victoria. Por si fuera poco, sería el propio Ramazani, una auténtica flecha, el encargado de hacer el tercer ya en el descuento.

Un castigo, quizá excesivo, para un Real Zaragoza muy inferior a su rival. Los aragoneses, en esta ocasión, apenas tuvieron la ocasión de inquietar a un Almería que está lanzado hacia LaLiga Santander.