Poca suerte tuvo Adrián González en su paso por el Real Zaragoza. El veterano centrocampista apenas pudo mantenerse en el equipo temporada y media, tiempo marcado por las lesiones y la mala racha general del equipo aragonés.
Así, el futbolista madrileño se vio obligado a salir del club blanquillo en el pasado mercado invernal. Puso rumbo a otro equipo de LaLiga SmartBank, el Fuenlabrada, en el que encontró algo más de continuidad e incluso volvió a marcar, aunque no pudo evitar el descenso.
Ahora, tras un verano en el que no ha conseguido encontrar un equipo a la altura de sus pretensiones, Adrián González se reencontrará con su padre, Míchel, en Olympiakos. Lo hará como uno de los ayudantes del entrenador, que regresa al equipo griego al que ya entrenó entre 2013 y 2015, logrando dos títulos de Liga, una Copa y accediendo a octavos de final de UEFA Champions League.
No será la primera vez que padre e hijo comparten vestuario. Ya sucedió en Getafe, en las temporadas 2008/09 y 2009/10 y de forma más efímera en Málaga, en la 2017/18. Ambos dirigirán de forma conjunta el destino de un Olympiakos que cuenta en sus filas con otro exzaragocista como es el centrocampista Pep Biel, recientemente fichado.