Gaizka Larrazabal parece decidido a hacerse un hueco en el Real Zaragoza tras una primera temporada llena de dudas y un curso de aprendizaje en el Amorebieta. Precisamente allí comenzó una transformación que ahora le sirve para ser una alternativa en el lateral.
Así lo explica el propio jugador en ElDesmarque Zaragoza “el año pasado cuando salí del Zaragoza y me tocó jugar en una posición nueva no estaba seguro de que lo fuera a hacer bien. Al final yo soy extremo, extremo de toda la vida. A mí lo que me gusta es ser ofensivo, estar en las jugadas que relacionas con el gol. sobre todo cuando cojo balón en tres cuartos: encarar, intentar hacer gol, chutar. Es lo que llama a todo jugar ofensivo y me tocó vivir una faceta mía, defensiva, que no sabía que tenía y que me gustó. Me gustó y empecé a apreciar lo que realmente es ser un buen defensor”.
Ahora, en el Real Zaragoza, parece asentado en esa posición “he visto que puedo llegar a ser un lateral derecho importante y creo que es algo que tengo que trabajar”, por lo que se ha ganado la confianza de los técnicos “los dos me dejaron claro y Fran en este caso me ha dejado claro que puedo llegar a ser un buen lateral derecho por mis características y yo creo que es algo que habrá que trabajar y yo tengo muchas ganas de hacerlo y creo que se me puede dar muy bien”.
Aunque es consciente de que su cambio al lateral le obligará a renunciar a parte de sus virtudes, “como lateral en vez de tener 8 ó 9 cada partido como extremo pues tienes 3 ó 4 y elegirlas bien” porque sabe que “cuando eres lateral tienes que medir más cuando sumarte al ataque porque al final te sumas al ataque y dejas un agujero en defensa que hay que cubrir”.
El aterrizaje de Larra en el Real Zaragoza no fue fáci y él, como sucede ahora con Ratón, fue objeto de la crítica de La Romareda. Algo que, sin embargo, ha logrado dejar atrás. El vasco reconoce que “cuando salí del Athletic es una burbuja que al final estás muy muy protegido. Siempre, cuando me han preguntado esto, siempre he dicho que es como que sales a la realidad, o sea que fuera de ahí hay fútbol también y te das cuenta que no estás tan protegido. Hay clubes más exigentes que otros en el sentido de que la presión es mayor y es algo con lo que tienes que lidiar”.
Su solución pasa por resistir la crítica, “siempre he tenido una gran confianza sobre mí mismo y creo que es una faceta y es un aspecto muy importante en un jugador. Por supuesto creo que Álvaro (Ratón) la tiene. Tiene confianza en sí mismo y ha de tenerla porque es muy importante para jugar, sobre todo en estas categorías y a estas alturas. Creo que al final eso es algo que siempre va a haber, la gente siempre va a exigir, siempre va a haber esa presión. Nosotros somos conscientes y de una manera u otra nos tenemos que intentar evadir de eso. Todos sabemos que para estar aquí hemos tenido que hacer cosas bien, más cosas bien que mal y es con lo que tenemos que tirar para adelante y tenerlo claro”.
Aunque también es consciente de que puede haber momentos malos “siempre va a haber momentos en los que hagas mejor las cosas y otros que igual no estés teniendo el día, pero en esos momentos es cuando tienes que ser mentalmente fuerte y decir: oye soy buen jugador, he llegado a hacer cosas muy bien y ya está. Es lo que tienes que tener en mente y no dejar que las críticas y demás te puedan”.
Por último, Gaizka Larrazabal se ha mostrado ambicioso respecto a lo que resta de temporada, reforzando el mensaje que dejó Fran Escribá “el míster ha dejado claro que este es un equipo que va a ir de menos a más, nosotros también lo creemos así, estamos haciendo un buen trabajo y yo me pongo más el objetivo de estos dos partidos que quedan hasta el parón de navidades, ganar los dos”.
Y cree que “para que lleguen las cosas hay que pensar un poco en grande. Sin evadirse de la realidad, pero eso, a corto plazo sacar todos los puntos que quedan hasta ahora y después de navidades empezar a entrenar otra vez dando el callo desde el principio y pensando en ir hacia arriba, por supuesto”.