El Real Zaragoza se ha topado con su versión más prolífica en el tramo crucial de la temporada. Después del tanto de Fran Gámez ante el Granada el conjunto aragonés suma cinco jornadas consecutivas anotando -mejor racha del curso- y acaba de un plumazo con el mal perenne por excelencia: su escasa producción ofensiva. El conjunto aragonés ha conseguido repartir responsabilidades goleadoras en último mes y hasta tres futbolistas (Puche, Lluís López y el propio Gámez) han abierto su cuenta personal.
“Tenemos un problema de gol, no tenemos delanteros como otros años de 15-20 goles”, Fran Escribá ha repetido esta frase hasta la saciedad y, por fin, el equipo ha sabido encontrar un equilibrio que le permita progresar. Defensas (Lluís López y Gámez) centrocampistas (Vada y Bermejo) y extremos (Bebé y Puche) han camuflado la sequía de Giuliano y el Real Zaragoza ha encontrado fuentes de generación alternativas: el balón parado, las transiciones, los golpeos desde larga-media distancia o los centros al área han dado rédito.
De hecho, los siete goles que suma el Real Zaragoza en las últimas cinco fechas lo colocan como el tercer equipo de la categoría que más goles ha marcado en ese periodo de tiempo (sólo superado por Real Sporting y CD Mirandés).
No necesita echar la vista demasiado atrás el Real Zaragoza para toparse con una dinámica similar. La campaña pasada, de la mano de Juan Ignacio Martínez, los blanquillos vieron puerta durante siete encuentros seguidos en dos etapas diferentes. Entre la jornada 10 y la 16 (con el equipo inmerso en la famosa racha de empates), los maños anotaron ante Málaga, Ponferradina, Girona, Mirandés, Burgos, Real Sporting y Las Palmas y sacaron 13 de 21 puntos. Igualmente, en la segunda vuelta el Real Zaragoza marcó a Ibiza, Málaga, Leganés, Las Palmas, Real Sporting, Almería y Fuenlabrada para firmar un 14 de 21 con el que amarró la permanencia.