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El verdugo copero del Real Zaragoza acaba a puñetazos en su visita a Estepona

D.M.

El pasado 13 de noviembre el Real Zaragoza viajó hasta tierras extremeñas para afrontar su partido de primera ronda de la Copa del Rey. Allí esperaba el CD Diocesano en el que fue el primer partido de Fran Escribá al frente del equipo aragonés.
Un choque deficiente por parte del equipo blanquillo, que acabó cayendo con estrépito frente al conjunto de Segunda RFEF por 1-0, el solitario gol que anotó Dani Sales al transformar un penalti cometido por el guardameta visitante, Álvaro Ratón.

La temporada no está siendo fácil para el modesto equipo cacereño, que se encuentra luchando por lograr la salvación, siendo penúltimo de su grupo a cinco puntos de la tranquilidad. Precisamente el último fin de semana dio un gran paso hacia el objetivo, logrando la victoria frente al CD Estepona, equipo que aspira a lograr un puesto de promoción por el ascenso.

Más allá del resultado final, 0-1 para los extremeños, el partido ha saltado a los medios nacionales por lo sucedido una vez se pitó el final. Una trifulca entre jugadores de uno y otro equipo que acabaron a puñetazos, mostrando una imagen lamentable y muy alejada de lo que debe suceder sobre un terreno de juego.

Razak Brimah, un viejo conocido del Real Zaragoza

Razak en un partido entre el Córdoba y el Real Zaragoza (Foto: Daniel Marzo). 

Uno de los grandes protagonistas de la pelea fue el portero del Estepona, Razak Brimah. El guardamenta ganés, criado en la cantera del Real Betis, es un viejo conocido del Real Zaragoza. En su etapa en Segunda división jugó contra los aragoneses, tanto con el Mirandés en la temporada 2014/15 como con el Córdoba en la 2015/16.

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