La magia del fútbol ha conseguido que medio mundo viva pendiente de lo que sucede en Wrexham. La pequeña localidad del norte de Gales cuenta con un equipo que se encuentra, en estos momentos, a punto de conseguir el ascenso de categoría, dejando atrás la Quinta división inglesa para alcanzar la conocida como League Two (podría llegar este sábado, de ganar al Boreham Wood).
Un interés que, en realidad, responde poco a lo meramente futbolístico, pero que ha logrado trascender los límites de lo deportivo. Todo gracias a dos actores, Ryan Reynolds y Rob McElhenney, que en 2021 decidieron adquirir el club, uno de los más antiguos del mundo, fundado en 1864, con la firme apuesta de tratar de llevarlo tan arriba como sea posible.
Por si fuera poco con la relevancia adquirida por el renombre de sus dueños, además, ambos protagonizaron un documental en el que explicaron sus andanzas como dirigentes del Wrexham durante su primera temporada en una serie llamada ‘Bienvenidos al Wrexham’. Todo un éxito televisivo que ha permitido extender la marca del cuadro galés a lo largo y ancho del planeta. Tanto es así que el club se ha convertido en un fenómeno mundial que acapara pratrocinios de algunas de las marcas más importantes del mundo, como TikTok, Expedia o Vistaprint.
Lo cierto es que el Wrexham siempre ha sido un equipo modesto, pero que cuenta con una larga historia a sus espaldas. Durante décadas fue uno de los principales equipos galeses y llegó incluso a militar en la Segunda división inglesa. Además, dominó la Copa de Gales con asiduidad, lo que le permitió incluso competir en Europa cuando se le concedió permiso a los equipos galeses, haciendo su debut en la Recopa en el año 1972.
Así fue como el Wrexham acabó cruzándose en el camino del Real Zaragoza, único equipo español que ha jugado con el cuadro galés en competición oficial. Sucedió en el año 1986, después de que los blanquillos ganaran la Copa del Rey frente al FC Barcelona y los galeses hicieran lo propio ante el Kidderminster Harriers.
Ambos tuvieron además que superar una primera ronda antes de verse las caras. El Wrexham lo hizo frente al Zurrieq de Malta, mientras que los blanquillos lograron doblegar a la Roma en una eliminatoria que forma parte de la historia del club aragonés.
De esta manera, el 22 de octubre de 1986 el Wrexham se presentaba en el estadio de La Romareda. Un cruce que se hizo más duro de lo previsto al Real Zaragoza, incapaz de perforar la meta rival en el encuentro de ida. En la vuelta, el 5 de noviembre en el Racecourse Ground, el estadio internacional más antiguo del mundo y ante más de 14.500 personas, los zaragozanos consiguieron superar la eliminatoria, no sin dificultad. Tras el 0-0 con el que se llegó al final de los 90 minutos, el chileno Yáñez anotó dos goles en la prórroga, igualados por los tantos de Massey y Buxton, que pusieron el 2-2 final.
Esa temporada, el Real Zaragoza llegaría hasta semifinales de la competición europea. Tras eliminar al conjunto búlgaro del Vitosha Sofía, acabaría cayendo ante el Ajax de Cruyff con Rijkaard o Van Basten, entre otros. Del Wrexham poco se supo hasta ahora, convertido en un fenómeno de masas del que están pendientes aficionados al fútbol de medio mundo.