A continuación, les mostramos el comunicado que nos ha hecho llegar el abogado del propio Jonatan Valle:
"A/A Don Fernando Iturbe Cuervo
Secretario Técnico del R.C. Recreativo de Huelva
Avenida del Decano del Fútbol Español s/n
21.001 HUELVA
Estimado Sr:
Nos ponemos en contacto con Ud. por expreso deseo de nuestro cliente, Don Jonatan Valle Trueba, antiguo jugador de ese honorable Club Decano, a fin de hacerle el siguiente requerimiento.
Como es de su conocimiento, pues así lo ha puesto de manifiesto públicamente en ruedas de prensa, Don Jonatan Valle fue víctima la semana pasada de un acto presuntamente delicitivo, cuando una persona, aún no determinada, sin autorización previa, e ilegalmente, subió a la red y a los foros sociales de internet el contenido de un audio privado, en el que nuestro cliente hacía una serie de manifestaciones, siempre dirigidas a las personas que componían el grupo de watts app, y por lo tanto en tono distendido, informal y de broma.
De manera absolutamente maliciosa, premeditada, con alevosía, y, sin duda alguna, buscando hacer el mayor daño al jugador, esta persona, al cometer su acto criminal, era sabedor de que dichas manifestaciones, sacadas del contexto en que fueron hechas, darían lugar al malentendido y a la confusión que luego se ha provocado de manera efectiva, y que no era otro que hacer creer que en dicho audio Jonatan Valle se estaba refieriendo a los onubenses en general, o a la aficción albiazul en particular. Obviamente cuando unas declaraciones se descontextualizn, y se sacan del ámbito en el que fueron hechas, es muy fácil crear esta confusión, y de ahí la especial maldad del autor de este ilícito penal. Si se escuchan todas las declaraciones vertidas en ese grupo de chat, es fácil comprobar que los adjetivos utilizados por nuestro cliente van siempre referidos a los miembros del grupo y no a nadie más. El daño está hecho, pues se han puesto en boca de nuestro cliente cosas que él ni piensa, ni desde luego ha dicho, ya que nada más lejos de su intención, y de sus sentimientos hacia ese honorable Club, que ofender en forma alguna a sus miembros o a su respetable aficción, a la que el jugador tiene en altísima estima.
Nuestro cliente nos ha encargado poner en conocimiento de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad estos hechos, a través de la correspondiente denuncia, para que por la Brigada de Investigación Tecnológica se determine, tras las pesquisas oportunas, quién o quienes han sido las personas que han cometido este acto tan vil, desleal y perjudicial para su imagen, buen nombre y pofesionalidad, pues no en vano el Código Penal califica los mismos como un delito de descubrimiento y revelación de secretos, y otro de injurias graves con la agravante de divulgación.
Estos son los hechos ocurridos, y por lo tanto, entendemos que con la información que le trasladamos a tavés de esta carta, cualquier duda que Ud. pudiera tener acerca del comportamiento del jugador, sus sentimientos hacia el Club y su aficción, debería quedar absolutamente despejada, pues Ud. mismo podría haber sido una más de las personas que, fruto del malentendido creado artificial y maliciosamente, hubiera creído esta versión malintencionada.
No obstante lo anterior, lo cierto y verdad es que Ud. hizo unas declaraciones en rueda de prensa, que dicho sea con el debido respeto, consideramos absolutamente desafortunadas, ante todos los medios de comunicación allí convocados, en los que, con base en la información que circulaba por la red, y seguramente víctima del malentendido, dio por válidas las mismas, haciendo referencia hacia el “estado personal en que se podría encontrar el jugador para haber hecho esas declaraciones”, hacia su “poca inteligencia”, a su carrera en el Recre (“niño mimado”), o hacia su nueva etapa en el Lugo (“si yo fuera aficionado del Lugo estaría temblando”); o incluso demostrando desprecio a la verdad ante la posibilidad mostrada por los periodistas de que todo fuera una broma (“ me da igual si era de broma”).
Estas declaraciones hechas por usted, con la finalidad de que las mismas fueran divulgadas por los medios, entendemos que eran gratuitas, del todo innecesarias, y en cualquier caso es obvio que han afectado a la imagen, honorabilidad y profesionalidad de nuestro cliente, pues se las podría haber ahorrado si antes de hacer tales afirmaciones hubiera tenido la discrección y la diligencia de averiguar y contrastar los hechos, por ejemplo, llamándole personalmente para escuchar su versión y comprobar de primera mano qué es lo que había ocurrido.
Como quiera que esto no ha sido así, desgraciadamente, y Ud. ha dado pábulo y credibilidad a lo que circulaba por la red, entendemos que una vez aclarados los hechos, y para restituir el buen nombre, profesionalidad, buena imagen y honorabilidad de nuestro cliente, le requerimos expresamente por medio de la presente para que, si lo considera oportuno, pida disculpas públicamente, en rueda de prensa, retirando expresamente los calificativos que con absoluto desprecio a la verdad manifestó en su rueda de prensa (estado en que se encontraba, niño mimado, su inteligencia, etc) y explicando a los medios que de haber sabido la verdad obviamente dichas declaraciones no se habrían producido.
Si por el contrario Ud se reafirma en las mismas, y no subsana ni repara el daño causado, tenemos instrucciones de nuestro cliente para proceder penalmente contra Ud., por entender que podría haber cometido un delito de injurias graves con el agravante de divulgación, sin que a partir de la fecha, y tras este requerimiento, quepa alegar por Ud. desconocimiento de lo sucedido, pues ha sido expresamente informado con carácter previo.
En la confianza de que sabrá entender las razones de esta carta, y sabedores de que, involuntariamente, todos podemos ser objeto de un acto desagradable como el que ha sufrido Jonatan Valle, esperamos muy sinceramente que repare el daño causado, y ofrezca su sinceras disculpas públicas a nuestro cliente, pues nos ha transmitido instrucciones de solucionar esto de una manera amistosa y no judicial, y de tener que llegar a los Juzgados sería única y exclusivamente por su propia voluntad, de ahí que le ofezcamos la oportunidad de rectificar.
En espera de sus noticias, reciba un saludo cordial, atentamente,
Ltdo. Pedro Antonio Pérez Álvarez
Colegiado 10.397 del I.C.A. de Sevilla "