El jugador del Recreativo de Huelva Óscar Ramírez afirmó que era "necesario" que se interrumpieran todas las competiciones, porque la epidemia del coronavirus se estaba "yendo de las manos", por lo que consideró que las autoridades han tomado "la decisión que había que tomar" mientras "se espera que el virus se extinga".
"Creo que ya ha llegado un punto en el que era lógico que se suspendiera totalmente la competición", aseguró en declaraciones a Efe el defensa recreativista, que indicó que, aunque se jugara a puerta cerrada, los futbolistas están "en contacto" entre sí, sudan y también están "en riesgo".
Ramírez destacó que en la plantilla del Recreativo, que milita en el Grupo IV de Segunda División B, todos están "bien", no hay ningún componente "con síntomas" ni tampoco se ha visto necesario por parte de los servicios médicos que se sometan a ningún test, aunque sí siguen las recomendaciones oportunas.
El jugador gerundense manifestó que llevan bien que los entrenamientos sean a puerta cerrada, aunque reconoció que en el vestuario "extraña" que no vayan a jugar como mínimo los dos próximos fines de semana, algo que les "resulta raro".
"Nos centramos en entrenar y ver qué pasa, y permanecemos expectantes hasta nueva orden", dijo a Efe el zaguero del conjunto onubense, que añadió que no pueden hacer otra cosa que no sea "estar preparados" y continuar con su "trabajo".
También opinó acerca de las medidas que van más allá del fútbol y reconoció su inquietud ante la suspensión de las clases en los centros educativos.
"Tengo niños, los llevo al colegio, y claro que me preocupa bastante la situación. Hay que esperar y acatarla cuando se produzca (la decisión), pero entiendo que habrá que tomar más medidas", resaltó Óscar Ramírez.