La delantera española Esther González fue la protagonista de la rueda de prensa previa al partido de Suiza de la Liga de Naciones. Habló sobre su vuelta a las convocatorias y del buen ambiente que se respira en el vestuario con Montse Tomé. Además, expresó que el equipo está centrado en materializar las ocasiones y, sobre todo, tener calma, porque contó que están acostumbradas tan acostumbradas a resultados abultados que contra Italia les faltó tranquilidad.
Esther expresó que “Montse (Tomé) siempre me da libertad en ser capaz de estirar el equipo, que las medios puedan moverse libres. Cuando el equipo está cerrado que sea capaz de aparecer y ser capaz de interpretar el momento de estirar y romper o cuando venir delante de las interiores. En definitiva, sentirme cómoda y potenciar mi juego”.
“Estoy muy feliz, tenía muchas ganas de volver a mi zona de confort después de estar en otro país adaptándome a otras cosas. Después de ganar el Mundial tenía ganas de volver y reencontrarme con las mejores. Con las compañeras muy bien, se nota que ya ha pasado la tempestad y con Montse también muy bien, teníamos una relación muy buena cuando estaba de segunda", finalizó.
“Contra Italia el bloque bajo nos costó, pero es verdad que es complicado cuando no hay espacios y la presión nos costó mucho ajustarla, pero sabemos que el partido de Suiza será diferente y esperamos otras cosas. Somos ambiciosas y nos queda corto ese resultado de 0-1”, dijo.
Esther también expresó que el grupo no está preocupado porque los equipos ahora sean duros en defensa y se encierren. “No tenemos temor, llevamos bastante tiempo enfrentándonos a bloques bajos, pero son cosas que se entrenan, forman parte de los partidos”.
“Hay algunos que son más abiertos o cerrados, nos analizan. No tenemos temor, entrenamos cada partido, cómo atacar, o qué jugadoras son mejores para un partido u otro”, dijo.
Sobre Suiza, la delantera del Gotham estadounidense señaló que “son un poco más agresivas, van a saltar mucho más que en el partido de Córdoba. Tenemos que jugar rápido, con más velocidad en las líneas de pase, amplitud en banda y llegar con mucha gente al área”.
“Ramona Bachmann y Ana-Maria Crnogorcevic son dos jugadoras que las conocemos todas, a nivel internacional tienen mucha experiencia. Bachmann es una jugadora que tiene movilidad libre y puede que nos desajuste un poco. Crnogorcevic sabe romper muy bien entre líneas y con balones a la espalda”, dijo.
“Son dos grandes jugadoras, pero nos centramos mucho en nosotras, y cuál es el peligro que podemos crear, cada partido es diferente”, dijo la delantera, que sobre el posible Balón de Oro de Aitana Bonmatí apuntó que “tenemos la suerte de tener a varias jugadoras a poder optarlo, ojalá que se quede en España. Es una felicidad compartir vestuario con jugadoras de tal calibre”