España ha logrado sellar su billete para la próxima edición del Mundial que se disputará en Rusia el próximo verano. Los de Lopetegui ganaron con contundencia a Albania y siguen demostrando que a día de hoy, esta selección aspira absolutamente a todo. Gran parte de culpa la tiene el mago Francisco Alarcón, con otra actuación estelar y demostrando que atraviesa un momento de forma sencillamente espectacular.
El jugador del Real Madrid es una pieza clave en el esquema del seleccionador español. Cuando a un crack de la talla del malagueño le das alas para moverse por el campo a sus anchas, el resultado puede ser demoledor. Tras su brillante partido ante Italia, Isco lo ha vuelto a hacer y ha marcado las diferencias. El centrocampista salió de la partida y tan solo tardó 23 minutos en apuntarse otro tanto en su cuenta con un trallazo dentro del área que superó a Berisha.
Esta noche en Alicante ha vuelto a aparecer la magia del de Arroyo de la Miel y cuando eso pasa el resultado está claro: Triunfo y clasificación. España baila e Isco pone la música.
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