Ya es oficial: Jorge Vilda, destituido. Tal y como se venía anunciando en las últimas horas, la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), con Pedro Rocha a la cabeza de manera interina tras la suspensión de la FIFA a Luis Rubiales, ha decidido prescindir del técnico de la selección española femenina apenas dos semanas después de lograr el hito histórico de ganar el Mundial.
La Real Federación Española de Fútbol, en una de las primeras medidas de renovación anunciadas por el presidente Pedro Rocha, ha decidido prescindir de los servicios de Jorge Vilda como director deportivo y seleccionador nacional femenino, cargo, este último, al que accedió en 2015. La RFEF agradece su labor al frente de la Selección y en sus funciones de máximo responsable deportivo de las selecciones femeninas, así como los éxitos cosechados durante su etapa coronados con la reciente consecución del Mundial. Ponemos en valor su intachable conducta personal y deportiva, siendo una pieza clave en el notable crecimiento del fútbol femenino en España. Durante su extensa etapa, Vilda ha sido promotor de los valores del respeto y la deportividad en el fútbol.
Desde su llegada a la Federación, Jorge Vilda ha dado un notable impulso que se refleja en los grandes resultados obtenidos. Como entrenador, alzó dos veces el Europeo sub-17 y también conquistó el Europeo sub-19, siendo la consecución del Mundial de Australia y Nueva Zelanda el mayor de sus logros. Cuando, en 2015, asumió el banquillo de la Selección, el combinado nacional estaba lejos de la élite y ahora mismo ocupa la segunda posición del ranking FIFA.
Como director deportivo, España ha ganado el Mundial sub-17 en dos ocasiones (2018 y 2022) y también alzó el trofeo en categoría sub-20 (2022). Además, en el palmarés lucen dos campeonatos de Europa sub-19 y dos Europeos sub-17, siendo la cantera nacional la más laureada en la actualidad.
Las RFEF quiere expresar su gratitud a Jorge Vilda por los servicios prestados, por su profesionalidad y su dedicación durante todos estos años, deseándole para el futuro los mejores éxitos. La RFEF se queda con un extraordinario legado deportivo gracias a la implementación de un modelo de juego reconocido y una metodología que ha sido motor de crecimiento para todas las categorías femeninas de la selección.