Aunque José Mourinho ya no esté en LALIGA EA Sports, mientras siga entrenando siempre nos llegará alguna de sus extravagancias. La penúltima fue su crítica a los jugadores de su club, la AS Roma, lanzándole un dardo envenenado a Pep Guardiola… sin mucho contexto. Ahora el portugués la ha liado con el idioma y con la estabilidad emocional.
Todo empezó en la previa al partido que enfrentó el pasado domingo al Sassuolo y a la Roma. Mourinho dijo en rueda de prensa que no le gustaba que Matteo Marcenaro arbitrase el partido. “Me preocupa Marcenaro. Lo tuvimos tres veces como cuarto árbitro y la sensación es que no tenga estabilidad emocional para partidos de este nivel. Tampoco me deja tranquilo el VAR, Di Bello, fuimos a menudo desafortunados con él”. Por estas palabras, la Federación Italiana de Fútbol abrió un expediente a José Mourinho.
Como no podía ser de otra manera, esto no quedó ahí. El partido se disputó y, tras el encuentro, que acabó 1 – 2 a favor de los romanos, Mourinho quiso reivindicarse contra la Federación haciendo de las suyas. Cuando habló para las cámaras de DAZN, habló en portugués cuando lleva toda la temporada hablando italiano.
— FriedkinismoArchivio (@Friedkinismo5) December 3, 2023
"Quiero dar las gracias al club porque en las últimas 24 horas me ha ofrecido su apoyo y, por tanto, la 'estabilidad emocional' que uno necesita para hacer este trabajo. Ha sido una victoria trabajada, sufrida y merecida, porque incluso cuando estábamos en desventaja fuimos mejores. Me alegro por los jugadores", dijo en directo.
Y es que Mourinho acusó a la Federación de no entender lo que quiso decir. Se excusó diciendo que su italiano está poco pulido. “Hoy hablo en portugués porque mi italiano no está tan pulido para expresar ciertos conceptos, como el de la estabilidad emocional, que es una cualidad buena y necesaria para rendir al máximo nivel”, concluyó.