El de Bailén ha tocado otros temas de la actualidad sevillista, empezando por las lógicas consecuencias derivadas de este asunto… si es que se producen:
La reacción del resto de compañeros: "No hay problemas. Hay muchos momentos en los que por cualquier circunstancia se saltan las normas y esto se lleva como hay que llevarlo. Han reconocido su fallo delante de los compañeros y eso es lo importante".
Reacción de la grada: "No debe silbarles. Es soberana. Puede hacer lo que crea. Tendríamos que ver si esos jugadores han salido y han rendido después de ese hecho. Está olvidado, pasado y pensar en el Almería".
Huye de la palabra crisis: "Estoy preocupado relativamente. Si el día del Villarreal no hubiera reaccionado, no hubiera tenido ocasiones, ni amor propio, eso sí sería un síntoma negativo. Hay momentos que nos nos vienen las cosas de cara".
¿Habrá muchos cambios buscando cambiar la tendencia?: "Cuando ganamos en Dortumund y después ganamos al Atlético con otro equipo no hablábamos de esas cuestiones. Todo era que el entrenador quería tener enchufado a todo el mundo. Cuando se pierde, Manzano no tiene claro el once. Ni una cosa ni otra. Recuerdo que dije que quería un equipo equilibrado y fresco. En Vilarreal con respecto al PSG solo hubo tres cambios. No es motivo de no tenerlo claro, sólo que tenemos partidos de gran nivel y los futbolistas están deseando participar".
Fichajes: "Hay dos fechas que nos ocupan. Almería y Borussia. Desviar situaciones que no sean meramente futbolísticas es crear un gasto de energía innecesario. Hasta que no pasen estos dos partidos hay que estar centrados. Todo el sevillismo debe estar unido y después Dios dirá".