Desde 2001, año en que el Sevilla abandonó la firma Umbro para pasar a Joma, el conjunto hispalense casi siempre ha mantenido una línea bastante firme con su primera camiseta, la blanca. De hecho, la de la temporada 2003/04, por ejemplo, era bastante similar a la acual. Luego algunos detalles rojos han ido aderezando las primeras equipaciones. Algunas líneas horizontales o verticales se han ido añadiendo o suprimiendo según la temporada.
También han variado los cuellos de las equipaciones, así como las mangas y la estética de los dorsales.
Como segunda camiseta casi siempre se ha respetado el rojo o alguna variante, como el carmesí, y es en la tercera donde se han introducido más variaciones: morados, grises, rosas, naranjas, arlequinadas, celestes, ahora negras...
Evidentemente, al final las equipaciones quedan para el recuerdo según dónde y cómo se luzcan, por eso la naranja siempre dejará un buen recuerdo en el sevillismo, porque fue la temporada en la que compitió con ese color en muchos campos de España por la Liga, por ejemplo. Más desapercibidas pasaron, por ejemplo, la arlequinada, que apenas se pudo lucir en algún partido amistoso, o alguna negra, que el Sevilla lució hace tres temporadas en Villarreal.
Ahora, con Li-Ning, se vuelve a la sobriedad y a los colores lisos en todas sus vertientes. La marca china tendrá como mínimo seis años para variar sus modelos, los seis años de contrato que mantendrá a priori con el Sevilla.