Sin duda, el caso más enquistado es el de Alexis Ruano. El central malagueño tiene aún tres años de contrato con el Sevilla, ya que en el verano de 2010 firmó por cinco temporadas y por cinco millones de euros. En los últimos meses de la Liga jugó cedido en el Getafe, pero ahora ha vuelto a la disciplina nervionense y de momento, su salida se antoja complicada.
Porque Alexis sigue teniendo contrato en vigor, un buen contrato además, y su rendimiento hace difícil encontrarle acomodo con un traspaso.
Además, el jugador, por el momento, no tiene constancia de que tenga que buscarse una salida obligada, por lo que su propósito es acudir a la pretemporada.
El Sevilla, con todo, está manejando su nombre para intentar incluirlo en alguna operación, sobre todo en las negociaciones que mantiene con el Getafe por el Cata Díaz. Porque la intención del equipo hispalense es firmar uno o incluso dos centrales. Esto, con la llegada de Bernardo, con Cala, con Escudé, cada vez más cerca de quedarse, e incluso con Spahic si no se le encuentra acomodo, deja a Alexis en un papel ya no secundario, sino incluso terciario en la plantilla.