En este sentido, la subdelegada del Gobierno en Sevilla, Felisa Panadero, ha presidido este jueves una reunión para ultimar los detalles del dispositivo de seguridad, en la cual han participado responsables de la Policía Nacional, Guardia Civil, Policía Local, Unidad Adscrita y del 061. Panadero ha mostrado su interés en colaborar con el club sevillista para que esta jornada transcurra sin incidentes, alejada de actos violentos "originados por aficionados radicales que tanto dañan la imagen de esta sociedad deportiva".
En el dispositivo, que se activará con antelación suficiente a la hora del partido, intervendrán casi 400 efectivos del Cuerpo Nacional de Policía, grupos de la Unidad de Intervención Policial (UIP) y Unidad de Caballería; agentes de la Guardia Civil, Policía Local de Sevilla, servicios sanitarios y asistenciales del 061, así como de seguridad y miembros auxiliares contratados por el Sevilla.
Los agentes vigilarán especialmente los puntos de reunión y concentración de los seguidores radicales locales y visitantes, tanto dentro del estadio como en las calles próximas al mismo. Asimismo, todas las puertas de acceso al campo estarán vigiladas permanentemente para evitar la introducción de objetos cuyo porte, exhibición o consumo queda prohibido por la Ley del Deporte.