"Lo lógico y normal es que haya una incorporación de un jugador importante, ya sea mañana, pasado, en cuatro, seis u ocho días. Veremos cuando llegue si se incorporará a Sudamérica".
No ha querido hablar de nombres propios y ha asegurado que no tiene presión por el sustituto ni por una hipotética subida de precio. Con todo, ha hecho una mención que coincide con la situación de Gameiro: "Si me sobra un jugador, creo que ahora se deprecia su valor, pero veremos. No vamos a crear expectativas con nombres propios. El que venga a sustituir a Negredo será un jugador importante, de nivel. Depende de quién sea será una cesión, o una compra, ya lo veremos".