Una tremenda revolución que ha dejado al Sevilla, por ahora, en una situación complicada. Es colista y, decisiones arbitrales a un lado, las sensaciones no son las esperadas en pretemporada. El papel del técnico, Unai Emery, ya está en entredicho y una derrota ante el Rayo, penúltimo, este miércoles encenderá todas las alarmas.
Y es que en los numerosos cambios que se han sucedido este verano en la plantilla del Sevilla es necesario tener su tiempo de adaptación. De aquel, ya histórico, triunfo ante el Deportivo (Míchel era el entrenador), hasta seis jugadores titulares no están en el equipo (Palop, Botía, Spahic, Medel, Navas y Negredo), dos no han sido inscritos (Maduro y Cicinho) y dos sí jugaron en Valencia (Rakitic y Navarro). Trochoswi, que estuvo en Riazor, no tuvo minutos en Mestalla.
Para más inri en esta revolución, ningún suplente en La Coruña estuvo este domingo en Valencia (Diego López, Fazio, Campaña, Luna, Manu del Moral, Babá y Kondogbia, de estos hasta solo el central argentino sigue en la plantilla). Y hablando de suplentes, ninguno de los seis goles del Sevilla en la Liga han llegado desde el banquillo...