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FC Barcelona
5-4
Sevilla FC

La más grande de las derrotas

Álvaro Ramírez

El Sevilla ha redefinido la épica en esta final de la Supercopa de Europa ante el Barcelona. Cayó, sí, pero seguramente será la más grande de todas las derrotas, más grande que todas las que dejó ir en otras finales, en otras Supercopas. El Sevilla demostró ser campeón, pero demostró más cosas. Demostró tener un corazón y un alma de equipo estratosférico, de equipo histórico, de un equipo que dolido, magullado, lesionado, limitado, mermado, se sobrepuso de tal forma que de un 4-1 logró igualar la final y llevarla a la prórroga, a un 5-4 que pasará a la historia del fútbol europeo y que pudo, debió, mereció ser un 5-5. No pudo ser, y lo lamentará el Sevilla, lo llorará incluso, pero sin embargo cada sevillista sale este martes henchido de orgullo en su pecho, en su escudo y en sus colores, como no puede ser de otra forma tras apoyar y comprobar cómo estos irreductibles se dejaron la piel para convertir en posible lo que era un imposible. Enorme Sevilla, enorme campeón, por mucho que el Supercampeón de Europa sea el Barcelona con ese gol de Pedro en el 114... en el 114.
De cómo un equipo se levanta tras tocar la lona dio un tratado el Sevilla, un tratado de bemoles, de corazón, de alma. De fútbol, claro, sin ello no podría haber llevado adonde llevó la final. Tras remontar un 4-1, tras mostrar debilidad, el conjunto de Emery creció hasta un imposible, hasta poner contra las cuerdas al todopoderoso Barcelona y hasta convertir en históricos a estos jugadores que tienen por delante una hermosa campaña, y si se deja la piel el equipo como en Georgia, será hermosa, seguro que lo será, como hermoso fue ver fajarse a los sevillistas en cada balón ya sin piernas, sin efectivos.
El partido arrancó a balón parado, de forma trepidante, con goles y con buenas ejecuciones de golpes francos. El primero, que hizo soñar a los sevillistas, de Banega tras una falta de Mascherano sobre Reyes que debió conllevar una tarjeta, de esas naranja porque el utrerano se colaba. Eso lo pudo echar de menos el equipo nervionense, pero no la ocasión, pues el centrocampista argentino hizo el primer tanto del partido de forma impecable. Solo tres minutos de partido y el Sevilla adquiría una ventaja que ante el Barcelona siempre es escasa, pero era ventaja al fin y al cabo.
En esos tres minutos dio tiempo a ver un gol pero aún no a ver cómo estaba Messi, en qué estado afrontaba el encuentro. Tardó poco en demostrarlo. Espectacular réplica del también argentino para colarla por la escuadra en una nueva falta al borde del área. Siete minutos y dos goles de falta, un inicio emocionante y, poco después, una remontada. De nuevo Messi, de nuevo de falta directa, aunque esta vez mucho más lejana y con cierta condescendencia del meta Beto, que pudo hacer quizás algo más en ese 2-1. Sumaba el marcador 15 minutos y lo que había quedado claro, en ese poco tiempo, es que Messi estaba intratable, que la portería del Sevilla sigue dejando dudas y que la capacidad defensiva del equipo era limitada. Se siguió demostrando en los minutos siguientes, hasta el tramo final de la primera mitad. Krohn-Dehli y Banega no llegaban a tapar a Messi ni a Iniesta, tampoco recibían ayuda del resto de jugadores de la medular, y a ello se sumaba la falta de entendimiento de los centrales, con un Rami a medio gas y un Krychowiak fuera de sitio. Precisamente al polaco era al que se echaba en falta en el centro del campo, su presión, su perfil infatigable e incómodo para los rivales. 
Cuando Messi bajó algo los brazos, descansó o se dosificó y el Sevilla quiso la pelota, poco a poco empezó a trenzar y crear jugadas el equipo nervionense. Incluso tuvo una ocasión clara que salvó Daniel bajo palos. Pero curiosamente fue entonces, en una contra tras un ataque numeroso del Sevilla en una acción a balón parado, cuando el Barcelona hizo el tercero. Salvó Beto ante Suárez primero, pero luego llegó Rafinha para aprovechar el desbarajuste defensivo en la línea de atrás y hacer el tercero.
La segunda parte ya empezaba cuesta arriba y cabía esperar un arrebato de intensidad, de orgullo, de atención. Se hizo esperar, desde luego, porque de inicio demostró el equipo hispalense precisamente lo contrario. Salió más relajado, algo más dejado. Faltas de concentración y fallos que escenificó Tremoulinas regalando un gol que parecía matar definitivamente el partido y que colocó al Sevilla en una complicada franja para una final de esta índole.
El choque, decíamos, parecía estar definitivamente muerto, pero he aquí que dice el himno del Sevilla que nunca se rinde, por muchas adversidades que tenga, por muchas contrariedades y muchos problemas. Sin defensas, con tres goles de desventaja, el equipo nervionense fue arriba por arrojo, como el que tuvo Vitolo con una primorosa galopada que acabó en magnífico pase al segundo palo para que Reyes apareciera y acortara distancias.
Parecía que el partido se calmaba, pero todavía le quedaban balas al Sevilla, vaya si le quedaban. Empezó a crecer en el partido, a crecer y crecer, a creer y a creer hasta empezar a anular al Barcelona, que ya apenas se acercaba al área de Beto mientras que el equipo de Emery se asentaba en el terreno contrario. Incluso Tremoulinas llegó para redimirse con un pase desde la izquierda que se transformó en claro penalti de Mathieu a Vitolo. Gameiro no perdonó y acongojó al Barcelona, que vio cómo el campeón de la Europa League se le subía a las barbas... y hasta lo alto de la cabeza. 
Los cambios de Konoplyanka, Mariano e Immobile, además, dieron nuevos bríos al Sevilla. Nuevos bríos y una nueva dimensión se abrió para el sevillismo cuando el italiano hizo un reverso tras un saque de banda y se la dio al ucraniano para que a placer hiciera el empate y para que los gritos de orgullo y alegría recorrieran obstáculos hasta atravesar toda Europa y acariciar los oídos de cada jugador del Sevilla en el Boris Paichadze mientras se abrazaban y celebraban la épica firmada ya por los campeones nervionenses, a falta todavía de minutos por delante.
Con el increíble 4-4, el equipo hispalense incluso tuvo arrestos para asustar aún más al Barça, y al Barça para asustar al Sevilla, lógicamente. Pero se agotaron los 93 minutos con ese empate para dar paso a una histórica prórroga, de entrada por cómo se había alcanzado.
La primera parte de la prórroga dio para que el Barcelona tuviera la pelota, para que el Sevilla defendiera con más agresividad, más orden incluso, a pesar de que las piernas respondieran menos, y hasta de tener una oportunidad, de Mariano Ferreira, que paró Stegen. Realmente dieron mucho aire los cambios y el Sevilla se asentó en ellos, en un enorme Banega y en un enorme sacrificio de los todos los jugadores sobre el campo. En la segunda mitad, eso sí, llegó un nuevo mazazo, esta vez definitivo. Una falta en la frontal pudo convertirse primero en penalti pero se convirtió en gol, de Pedro, tras una gran parada de Beto en un segundo remate de Messi. Un 5-4 celebrado por todo lo alto por los culés que clavaba un doloroso puñal en un Sevilla prácticamente irrecdutible. No merecía ese doloroso final un equipo que se vació.
Pero pasarán los días, y esta final se verá de otra forma, como debe verse en el fondo, como un ejemplo de lo que es este Sevilla y de lo que debe llevarlo a grandes cotas futuras, más aún, a pesar de lo conseguido.

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  1. Orgullo sevillista

    Pero que gran equipo tengo. Los sevillistas nos sentimos orgullosos de nuestro equipo. Lástima que haya gente que tenga que comentar los partidos de otros equipos porque los del suyo no interesan, ni a ellos mismos. Por cierto, no me imagino yo a aficionados del Sabadell decirles a los del Barcelona en algún partido: "Ahhh habéis perdido..." Criaturitas...

  2. Antonio

    Que grande es el Sevilla. Algunos se reiran por que perdió, pero para los que disfrutan con el futbol y entienden este deporte, el Sevilla es muy grande.

  3. JUan

    Para perderla hay que jugarla. El betin weno la tuvo que ver por tv. ORGULLOSO DE MI SEVILLA FC.

  4. TONGO

    Entro veo el gol de pedrito en el minuto 115 me río y ahora vuelvo jajajaja..........

  5. raton colorao

    tongo¿,todavia estas selebrando el colombino? estos mojinos son de risa

  6. five

    cierre el pico tongol...y disfrute del futbol de verdad....CRIATURITA

  7. TONGO

    5 lovitos tiene la lova 5 lovitos.........jajajajaja vaya ridiculo que habeis echo con un barcelona a medio gas con medio equipo del barcelona B. De momento mi betis ya lleva un titulo y los servilletas ninguno. Acostumbrarse a las manitas porque en los derbis os meteros un par de ellas. A segunda con las viejas danesas, viejas de utrera y el gran kakuta

  8. lucia

    Grande sevilla y qe pena q los buenos beticos jamas en la vida puedan ver , aunqe sea perder a su equipo en una final europea

  9. grouchosfc

    Enga so v ai na a dormir pensando en mi SEVILLAFC. ORGULLO

  10. grouchosfc

    Ke si ke te acuestes recordando la derrota de mi ekipo y contando socios ke al menos has rezado como muchos viendo el partido. Yo voy a ver un partido de tu ekipucho enseguia pero por lo ke veo tu has rezado como muchos para ke mi ekipo perdiera, gracias por tus rezos se nota ke somos grandes. Ahora de ke ekipo seras en otra final ? Supongo ke ya fuiste del boro, del español, del barca ( 0-3) del at. Madrid , del Madris, del geta, del Milán, del benfica, del dnipro alguno acertaras pero y el tuyo, como dice un amigo sevillista veo el penalti de nono me río y ahora vuelvo jajajajajaja penoso . Lo dixo ORGULLO.

  11. mazagatos

    Groucho pero las finales no se jugaban para ganarlas? Ah no que le habéis llegado a empatar al barça jejeje. Goooollll de e'mbia ah no que ha sido gooll de pedro!!!!!!!

  12. a llorar

    5 lobitos tiene la loba y como la bandera de japon na. Eladios y demas seres bocachanclas con un titulo moral. Venga a la cama con el pañúelo en una mano y en la otra el con so la 2r jjjjjjjjejeeejej

  13. grouchosfc

    ORGULLO. ORGULLO. ORGULLO.

  14. fulano de tal

    Que grande mi sevilla, pero lo mejor es que todo el planeta ha visto el espectaculo que es capaz de dar el equipo mas grande del sur de europa

  15. grouchosfc

    Mazagatos te seguiremos saludando con los 5 dedos o ya no te acuerdas. Esta noxe has tenido dos opciones . o VER a mi sevillafc . O ver la ultima llamada en telecinco. Y ya veo lo ke has visto. Sin mas comentarios sobre ti. Lo dicho . ORGULLO SEVILLISTA.

  16. grouchosfc

    Venga y ke ahora vengan con Pamplinas e historietas del tebeo, ke si esto y los num de aficionados

  17. mazagatos

    Sí.pero han perdió jajajajaja. Caparros saludame con la manita,jajajajaja.

  18. grouchosfc

    Sigo diciendo lo mismo . " ORGULLOSO DE MI SEVILLAFC" PESE A QUIEN LE PESE SOMOS GRANDES. ORGULLO. ORGULLO. ORGULLO. ORGULLO. ESTE AÑO DISFRUTAREMOS A LO GRANDE. LO DIXO ORGULLO.

  19. grouchosfc

    SIMPLEMENTE. ORGULLO. ORGULLO. ORGULLO. ORGULLO. ORGULLO. MUY ORGULLOSO DE MI EKIPO. GRANDE MI SEVILLAFC. SALUDOS EN SEVILLISTA.

  20. Ponteasi

    Pero que grande es mi equipo. Cuando terminó el partido tenía una sensación de felicidad con algo de tristeza, pero poca. Así es como se juegan las finales. Y ahora no me importa que los lechugas entren a reírse de la derrota. Esta final no la verán nunca. Nosotros si la hemos vivido. Gracias SEVILLA y EMERY por haberme hecho tan feliz, nunca lo olvidaré. CARCEL A LOS MALTRATADORES DE GENERO Y A LOS QUE LOS JUSTIFICAN, YA.

  21. eladio

    veo los comentarios de MARCA.COM y como hablan del sevillafc,me siento orgulloso de ser sevillista y mas que a nivel nacional hablen del pedazo de partido de mi sevillafc..que grande eres.

  22. Jose

    Siempre querremos ganar titulos, pero perder así no es ninguna deshonra. Magnifico partido disputado por ambos equipos, pero me quedo con los bemoles que han demostrado los jugadores del Sevilla hasta igualar un 4-1 adverso y con las piernas muy cargadas seguir intentando ganar el partido hasta el último segundo. Creo que tenemos un gran equipo, un equipo ¡CAMPEON!