Uno de los hombres más importantes de la estructura societaria del Sevilla FC es Rafael Carrión, que no en vano es una de las personas físicas con mayor número de acciones de la entidad.
Este lunes, el que fuera presidente del club nervionense ha atendido a los micrófonos de la Cadena COPE, en los que ha analizado el momento que se vive en la cúpula de la sociedad.
“Siempre me ha preocupado la inestabilidad en el club, yo dimití porque no veía estabilidad y me marché. Cuando he tomado decisiones actualmente es por la estabilidad del club. Si hay divergencias entre grupos o personas, que no deberían de ser, eso se debería de apartar. Eso influye muchísimo en la marcha deportiva. En todos los equipos pasa”, recordó Carrión, que afirmó que no ha tenido ocasión de hablar con José María del Nido sobre este asunto. “He hablado con el presidente, con la otra parte no me ha dado lugar”.
En todo caso, sí reconoció que antes de la Junta de Accionistas del pasado mes de diciembre se reunió con Del Nido, que fue muy crítico con Castro. “Es cierto. No sé con qué intención iba, pero sí es verdad que criticó la actuación del presidente y su gestión. Son reuniones que no se deben hacer públicas y me las reservo. Le vi muy ansioso, muy acelerado, con demasiada urgencia para cambiar todo y en eso no estoy de acuerdo. En la situación en la que se encuentra el Sevilla si esa ansiedad saliera al público sería peor”, recordó.
En esa guerra entre las dos partes, Carrión quiere mantenerse al margen. “No apoyo a nadie, soy totalmente independiente. Apoyo a lo que interesa o creo que interesa al Sevilla. En aquel momento y ahora no iba a apoyar lo que no se debe de apoyar. Quería la estabilidad y ahora quiero lo mismo, pues es la única forma en la que esto se puede ayudar. Metiéndonos en una pelea de gallos eso es mortal”.
Cuestionado sobre el futuro, no descarta el expresidente que haya que dar un giro de timó en el futuro, poniendo sobre la mesa que haya más opciones que las actuales. “Todavía no sabemos la situación en la que podría quedarse el club, pero puede haber una tercera opción, o una cuarta. Yo no soy partidario de nada. El tiempo dirá lo que haga falta en otro momento”.
Además, confirmó que el grupo de Carrión no piensa en volver a comandar el club. “Yo ni muerto vuelvo a la presidencia, porque lo he pasado muy mal. El grupo Carrión no está por tener la presidencia en ningún momento, en primer lugar porque ninguno tiene la suficiente libertad para poder ser ahora presidente del Sevilla”.
Para finalizar, fue ciertamente ambiguo ante la posibilidad de vender sus acciones. “Cada decisión que toma el Grupo Carrión es en una especie de consejo que se reúne y da la respuesta. Ahora mismo no te puedo decir porque no soy yo quien decide. No ha llegado ninguna oferta. El Sevilla es difícil que pueda ser vendido, las cosas pasan y en un momento dado pueden cambiar, pero en este momento no puede ser vendido”, sentenció.
Con todos mis respectos hacia usted al cual estimo y sé el peso que ha tenido todos estos años en el Sevilla FC. Sr. Carrión. Pero su postura de no decantarse no la creo acertada, aquí hay que buscar soluciones y declinarse por la situación más óptima para nuestro Sevilla FC. Yo sé bien que usted no toma decisiones a la ligera, pero estamos en una situación que de prolongarse en el tiempo puede hacer más daño del que nos imaginamos, por ello pienso que habría que cortar por lo sano y estblecer un patrón que guie al Sevilla FC por la estabilidad deportiva.