El partido de este miércoles del Sevilla FC sirvió como confirmación de que los vientos han cambiado en Nervión. Tras un mes y medio de competición pésimo, el equipo ha despertado y ha conseguido incluso clasificarse para las semfinales de la Copa del Rey eliminando a todo un Atlético de Madrid.
Además, el Ramón Sánchez-Pizjuán volvió a vivir un partido de gala de su equipo después del varapalo del derbi y de la mala imagen, pese a la victoria, mostrada ante el Cádiz CF.
Si hubo una figura que ha cambiado la opinión de la grada en apenas dos semanas, ese ha sido Franco Vázquez. El argentino, uno de los más señalados por la afición en la peor racha del equipo, se retiró ovacionado cuando fue sustituido por Pizarro en el tramo final del partido.
Ante el Atlético, el ex del Palermo firmó el que, posiblemente, ha sido su partido más completo como jugador del Sevilla. Participó en el jugadón del primer gol triangulando en varias ocasiones con Sarabia al primer toque y estuvo a punto de hacer el segundo con un cabezazo desde la frontal del área que no entró por centímetros.
Además, se entregó en el césped, acabando desfondado, e incluso mostró carácter encarándose con Gabi tras un encontronazo en la segunda mitad. Al final, fue sustituido en el minuto 83 y el sevillismo le brindó la ovación que merecía y que el futbolista esperaba. Que continúe este amor será bueno para ambos.