Las segundas oportunidades de Montella

La llegada de Vincenzo Montella al Sevilla ha traído la tranquilidad necesaria al equipo, tras el huracán que dejó Berizzo a su salida de la entidad. El técnico italiano no solo ha logrado revertir la imagen deportiva del equipo, sino que ha recuperado para la causa a algunos de los máximos baluartes que no lograron rendir a su nivel en el principio de curso y que a día de hoy vuelven a ser piezas clave gracias a las segundas oportunidades del entrenador.

Jesús Navas, Nzonzi y Muriel son los nuevos nombres propios en esta renovada etapa del club. El palaciego alternó titularidades y suplencias en sus primeros compases tras el retorno a la entidad sevillista, con un rendimiento ofensivo que distó mucho de lo que la parroquia nervionense anhelaba de él. Tal fue así que en los últimos ocho partidos con Berizzo el extremo apenas disfrutó de dos titularidades.
Sin embargo, la llegada de Montella y la lesión de Corchia han revertido radicalmente su situación. El italiano dio con la tecla maestra al retrasarlo al lateral y ahora es uno de los jugadores más en forma de la entidad. Así lo demostró ante el United, logrando noquear las opciones de un Alexis Sánchez que se topó ante un Jesús Navas que vuelve a llamar a las puertas de la Selección.
Un caso similar ha sufrido Muriel. El ariete cafetero llegó con el peso a sus espaldas de ser el futbolista más caro de la historia del Sevilla y la presión por sus carencias ofensivas terminó de dinamitar las opciones de un jugador que acabó relegado al ostracismo con Berizzo. Sin embargo, la complicidad con Montella tras su pasado en común en Italia han devuelto la confianza al jugador, que ya reivindica su valía a base de goles. En este año que recién comienza el colombiano se ha convertido en la referencia ofensiva del equipo, con tres goles y dos asistencias que han devuelto la ilusión a la parroquia rojiblanca y que depositan en Muriel las esperanzas de un delantero con mucho futuro por delante.
Por último, el caso más llamativo es el de Nzonzi. Era un secreto a voces que el mediocentro galo rompió su relación con Berizzo, de ahí a sus declaraciones donde reveló que su futuro estaba fuera del Sevilla y que le avecinaba una salida más que segura en el pasado mercado invernal. Sin embargo, Montella se propuso como objetivo primero el de convencer al francés y devolverle la confianza que le hizo ser una de las referencias del continente. Actualmente y olvidados los fantasmas del pasado, Nzonzi vuelve a ser el bastón de mando de la sala de máquinas sevillista siendo así una de las referencias principales en la columna vertebral del Sevilla.