El Sevilla arranca el próximo 26 de julio la temporada 18/19 de manera oficial, jugando la primera de las tres fases previas que tendrá que disputar de la Europa League.
El plan del equipo de Pablo Machín está trazado. A lo largo del próximo fin de semana debe llegar el entrenador del Sevilla para comenzar a preparar los entrenamientos de la primera semana, y apuntalar detalles del mercado. En las oficinas se sigue trabajando en fichajes y se espera que para la primera semana de trabajo haya alguna incorporación más que la de Roque Mesa.
Así las cosas, los futbolistas comenzarán a llegar el lunes 2 de julio para pasar los reconocimientos médicos y arrancar los entrenamientos el día 3. Está previsto que hasta el día 8 de julio el primer equipo permanezca en Sevilla para posteriormente partir a Benidorm el día 9, donde estará 10 días y jugará tres amistoso ante el Bournemouth, el Real Murcia y el Benfica.
Tres encuentros antes de medirse al ganador de la eliminatoria entre Neftçi PFK (de Bakú, Azerbaiyán) o Újpest FC (de Budapest, Hungría), en la primera ronda previa de la Europa League.
A un mes de que se juegue el primer partido oficial en el Sánchez-Pizjuán, al Sevilla y a su dirección deportiva le queda mucho trabajo por delante.
Desde que se hizo cargo como presidente el Sr. Castro, la entidad del Sevilla FC ha perdido el prestigio, la seguridad, la atracción deportiva para los jugadores y la confianza que generaba. No es casualidad que todo esto ocurra desde que comenzó el nombramiento de Castro, y es que, es Castro el único que ha deteriorado la imagen del Sevilla FC con el consentimiento del consejo. Aunque bajo su presidencia se haya ganado tres de las cinco UEFA Leagues, no quiere decir esto, que haya sido por su gestión al frente de la misma; se consiguieron porque heredó una fórmula administrativa, deportiva y económica que fueron las que hicieron grande al Sevilla FC, la cual no ha sabido mantener. Después de que se marchara del club todo lo bueno que había en él (dirección deportiva, jugadores, personal…), como consecuencia de su inoperancia, inestabilidad institucional, poco carisma y el desconocimiento del cargo que ostenta. Gracias al Sr. Castro, los futbolistas con un poco de caché, ya se piensan si venir o no para mejorar en su carrera, ya que desde que está este señor, casi todo ha sido desmejorado. La imagen que tanto costó ponerla en el cartel de los grandes, ahora está denostada; todas las circunstancias que con Castro han sucedido, han minusvalorado a la entidad (juzgados, caso vitolo, luchas de poder institucional, Berizzo, Montella, Arias…). Todos los acontecimientos negativos que ha gestionado este hombre, han dado como resultado la crisis en la que nos encontramos. Para empeorarlo aún más, ya que nadie quiere venir, ni siquiera como DD; se le ocurre la brillante idea de nombrar a Caparrós, más por su trayectoria en el club por el carisma que tiene entre la afición, que por su conocimiento del puesto que ocupa actualmente, el cual ya informó en un principio de que él no era la persona idónea para ocupar el cargo de DD. Escuchamos voces que dicen que ya aprenderá como Monchi, pero no se trata de aprender, esto no es un club de principios de siglo, esto es un club profesional, no podemos probar por probar y que nos dé el mismo resultado que con Monchi; las gestiones tienen que realizarse a razón de las exigencias de los compromisos deportivos, y ya desde hace mucho tiempo, se sabía que se iba a hacer una reestructuración del equipo, por lo cual las negociaciones deberían estar ya más que materializadas. El problema, sigo diciendo es el dinero, del que presume Castro, pero que no se ve porque no lo hay. Hay que vender para traer y vender no se vende. Y ya para colmo de cómo maneja este señor al Sevilla FC, Marchena en el mundial, cuando su trabajo es aquí y ahora. Lo que suele decir en estos casos UN DISPARATE.