Difícilmente habrá mejor forma de arrancar una Liga que la que ha firmado este domingo el Sevilla, en el estreno en el campeonato de Pablo Machín. La puesta en escena sevillista ha sido abrumadora, espectacular, rompedora, goleadora. Una primera parte fulgurante, en la que brilló prácticamente todo el equipo, dejó el partido visto para sentencia. Se encontró este Sevilla en dos bandas verticales, constantes, profundas, con Escudero y Navas en plan protagonista; se encontró en un centro del campo hábil con la pelota y sin ella, con Roque Mesa y Banega jugando cuándo y cómo querían; se encontró en los chispazos del Mudo, con su espectacular 0-1; se encontró en su goleador, André Silva, que en un partido marcó los mismos goles que en la Serie A en una temporada. Se encontró Pablo Machín en su Sevilla, que dejó un sello poderoso en la primera jornada que sirve para disipar dudas y dar confianza al proyecto, que aún está por rematarse con varios refuerzos.
Puede que el Rayo se haya mostrado tremendamente endeble, es probable que el conjunto nervionense tenga una marcha más por su ritmo oficial tras cinco partidos oficiales. Pero lo cierto es que en ningún caso es sencillo hacer lo que hizo el Sevilla, que se comió a su rival, que intentó arrancar el partido descarado pero que se tuvo que plegar ante lo que se le vino encima, ante la libreta de Machín.
La presencia de los jugadores de banda marca el sistema de Machín. Y en Vallecas, un campo recortado además, los carrileros se convirtieron en las piezas desquilibrantes del partido. Tanto Escudero como Navas llegaban una y otra vez, aparecían, pisaban área, asistían... Y eso lo posibilitaban los tres centrales y también un posicionamiento firme del centro del campo, con Roque y Banega dueños de todo, con la pelota y sin la pelota. Para colmo, arriba el Sevilla se encontró con pólvora. A pesar de no materializar todo lo que generó, cristalizó bastante, ya fuera por la calidad exquisita del Mudo (0-1), por las citadas llegadas por banda (André Silva 0-2) o incluso a balón parado (0-3).
Pudieron ser bastantes más a favor porque llegó mucho el Sevilla. Y la ocasión que recibió en contra, por cierto, la solventó Vaclik con acierto.
La presión alta, y convencida, con muchos efectivos, permite contar con muchos jugadores de ataque tras el robo, y montar jugadas rápidas de peligro y con alternativa de ataque. Y en la segunda parte se notó aún más. Con el dominio en el marcador y en el juego, el Sevilla se permitió tras el descanso contemporizar. Dio un par de pasos atrás en su primera línea, pero se mantuvo junto y en su sitio, por lo que cada vez que robaba salía rápidamente a la contra y cogía al Rayo totalmente desprotegido. Creaba superioridad en ataque con sencillez y de manera habitual, y las ocasiones seguían cayendo. Sarabia desde fuera, en un taconazo, Ba sacando bajo palos ante Jesús Navas... Y claro, tantas ocasiones llegaban que llegó el gol, otra genialidad del Mudo, otro más de André Silva, que en su debut marcó el hat trick y anotó el cuarto que dio el liderato provisional al Sevilla, VAR mediante, por cierto, pues tuvo que recurrir Mateu a él para validar el tanto del portugués. Como mediante VAR marcó el Rayo en un penalti que señaló la videoasistencia.
Harto pan, no sólo los periodistas, también los que dicen ser seguidores de Sevilla FC y lo único que hacen es criticar y criticar, a Castro, Caparrós, a Machín a Banega , al mudo, al utillero, al recogepelotas y al que vende las entrada en la taquilla, lo importante es criticar. Y mañana dirán eso de que bueno es mi Sevilla.
Leerse la crónica de un ekipo y otros y ahora mirar los resultados de uno y otro. Pedazo de planteamiento de machin, sabemos a ke juega nuestro ekipo gran fichaje el luso andre silva. AHORA más de un periolisto se tendrá ke tragar muchas de las palabras ke decía de nuestro ekipo FORZÁ SEVILLA FC.