Los fichajes, a prueba
El Sevilla FC afronta este domingo una cita más que exigente en Anoeta. Allí tan solo ha ganado 7 de los 59 partidos disputados. Además los de Machín buscarán hacerlo con un once plagado de novedades, en el que estarán algunos de los fichajes más caros de la entidad. Promes y Amadou, titulares.
El holandés está obligado a dar un paso adelante, tras la lesión de André Silva. Promes es el fichaje más caro de la entidad y también posee la cláusula más alta de la historia. Algo que, de momento, pesa y mucho, pues no termina de demostrar su valía. Apenas ha logrado un gol en 11 partidos y únicamente ha sido titular en la Europa League y en la Copa del Rey. Esta será su primera titularidad en LaLiga Santander.
Motivos más que suficientes como para tomarse la cita en serio, ante la exigencia de no acrecentar las dudas y demostrar por qué ha sido la mayor apuesta del club hasta la fecha.
En similares condiciones está Amadou, que tiene una buena oportunidad para reivindicarse. El centrocampista se convirtió en el segundo fichaje más caro del pasado mercado estival, junto a Gnagnon (15 millones). No obstante su mayor hándicap han sido las lesiones, que le han impedido entrar con regularidad en las alineaciones.
Ahora se encuentra completamente recuperado de sus molestias, ya volvió ante el Villanovense y en esta jornada aprovechará las lesiones de Mercado y Kjaer para enrolarse en el centro de la zaga.
Únicamente tres fichajes, de nueve, son habituales
Lo cierto es que a pesar de los casi 80 millones de inversión, pocos son los fichajes que han logrado asentarse en las alineaciones. Roque Mesa no es titular en LaLiga Santander desde hace casi dos meses. Gnagnon ha caído relegado casi al ostracismo. Aleix Vidal sigue sin dar el nivel esperado. Al igual que Promes. Amadou y Gonalons se han visto noqueados por las lesiones.
Únicamente André Silva, Vaclik y Sergi Gómez son los que han conseguido ganarse la confianza de Machín. Una complicidad que desde este mismo fin de semana deberían conseguirla Promes y Amadou, ante una oportunidad idílica para dar un paso adelante y demostrar el por qué fueron dos de los fichajes más caros de la entidad.