La rivalidad entre el Sevilla FC y el Valencia CF ha alcanzado límites insospechados desde que, en 2014, un cabezazo de Stephane Mbia apeara a los che de la final de la Europa League de Turín.
Este jueves el equipo valencianista se clasificó para la final de la Copa del Rey, eliminando al Real Betis, y en la celebración hubo cánticos antisevillistas.