El entrenador del Huesca, Francisco Rodríguez, declaró, tras la victoria de su equipo (2-1) sobre el Sevilla que en este partido tuvieron la fortuna que les faltó en otros encuentros.
Con la victoria, el Huesca mantiene vivas sus esperanzas de permanencia y la fe por salir del descenso: "Tenemos la misma fe que hace dos meses, pero somos realistas y sabemos que vamos a tener rivales difíciles hasta el final".
El técnico del conjunto azulgrana apuntó que saben quiénes son y de dónde vienen y que tienen que hacerse fuertes en casa.
"Hace dos meses nadie contaba con nosotros. El equipo ha dado muestras de compromiso enorme y nos hemos acercado poco a poco a donde estamos ahora", destacó.
Igualmente remarcó el "compromiso enorme" de sus jugadores con la situación porque nunca habían "bajado los brazos".
Francisco explicó que la primera parte del encuentro estuvo más igualada en cuanto a situaciones, posesión y ocasiones de gol, y que en la segunda el Sevilla les metió en su campo y que, por ello, fue "difícil salir de ahí".
El técnico almeriense reconoció que haber estado durante tantos minutos en campo propio había supuesto que el conjunto andaluz hubiera estado "cerca de puntuar".
Francisco dedicó la victoria a la plantilla, de la que dijo que hacía "un esfuerzo enorme", y a la afición oscense.
Sobre el VAR, que fue utilizado en tres ocasiones durante el encuentro, señaló que es algo a lo que "poco a poco" se van acostumbrando.
"Se hace difícil pero cuando se para es porque hay muchas dudas y entiendo que la decisión final es la justa y hay que irse acostumbrado poco a poco porque beneficia al fútbol", aseguró.
El técnico del conjunto azulgrana explicó que su equipo depende "del trabajo y de la ambición" de sus jugadores y añadió que en eso no les va a ganar "nadie" pero "siendo humildes".
Francisco desveló que sabía que en esta jornada habían perdido rivales directos como el Villarreal y el Rayo y que eso les metió más presión antes de jugar pero que habían sabido sufrir y llegar al final vivos.