Maxime Gonalons ha vuelto y quiere que sea para quedarse. El centrocampista del Sevilla se sintió de nuevo futbolista ante la Real Sociedad después de estar cuatro meses fuera de los terrenos de juego por una lesión y antes también se perdió una parte de la temporada por otro inconveniente físico.
El jugador cedido por la Roma, por el que el Sevilla se guarda una opción de compra a final de temporada, ya está listo para encabezar el centro del campo y convertirse en uno de los líderes para Pablo Machín. El técnico soriano ha echado mucho de menos a Gonalons en su ausencia, por todo lo que aporta tanto a nivel ofensivo como defensivo.
Gonalons no está en su tope físico pero sí debe ser ya uno más en las rotaciones de Machín. El entrenador del Sevilla medita apostar después del parón por el francés y dejar a Banega más arriba, con menos compromiso defensivo y más opciones de llegar al área rival. Aunque también será uno de los posibles recambios este jueves en Praga.
La poca confianza en Amadou dejan el puesto de pivote para Roque Mesa y el propio Gonalons, además de Banega. Pero Machín lleva mucho tiempo reclamando la recuperación del jugador cedido por la Roma, que no está viviendo unos meses felices en su etapa en el Sevilla.