La resaca de la derrota del Sevilla FC en el estadio de Ipurúa está siendo dura. Los aficionados sevillistas aún no se explican cómo se pudo descomponer el equipo en la segunda parte tras firmar una primera casi sobresaliente, aunque hay quien defiende que buena parte de la responsabilidad fue de Julen Lopetegui por sustituir a Joan Jordán, en un cambio que se ha convertido en habitual.
Al catalán ser sustituido en la que fue su casa y jugando contra su exequipo, el SD Éibar, le sentó a cuerno quemado y, de hecho, se sentó en el banquillo con un enfado considerable que captaron las cámaras. Incluso, lanzó una botella de agua contra el suelo.
Segundos después de ser cambiado, el árbitro asturiano González Fuertes se dirigió al banquillo para sacarle una tarjeta amarilla, algo que sorprendió debido a que se entendía que Joan Jordán se había enfadado consigo mismo.
Sin embargo, el acta del partido aclara la situación, y es que la citada botella de agua se metió en el terreno de juego.
Así reza el acta firmada por González Fuertes:
En el minuto 70 el jugador (24) Jordán Moreno, Joan fue amonestado por el siguiente motivo: Lanzar desde el banquillo una botella de agua al terreno de juego sin interferir en el mismo ni en ningún jugador.
De este modo, Joan Jordán ha visto su segunda tarjeta amarilla en lo que va de LaLiga Santander, por lo que aún está lejos de la suspensión por acumulación de amonestaciones.
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