El Equipo de Reconstrucción de Accidentes de Tráfico de la Guardia Civil todavía no ha finalizado la investigación del accidente de José Antonio Reyes, pero en las últimas fechas se han producido avances importantes.
Según adelante El Confidencial, las conclusiones preliminares indican que el accidente no fue debido tanto a un exceso de velocidad, que la hay, pero es residual, sino que al mal estado de los neumáticos.
Los agentes han podido conocer que, días antes del siniestro, el futbolista avisó a su hermano Jesús que quería utilizar el Mercedes Bravus S550. El vehículo no estaba en buen estado de conservación, así que el hermano de Reyes lo llevó a un taller de la provincia de Sevilla, les pidió que lo revisaran de arriba abajo, cambiaran las baterías, las llantas y las gomas. Incluso pasó la ITV.
Una neglicencia del taller es una de las hipótesis
El coche en teoría estaba a punto. Reyes se llevó el coche hasta Almendralejo. Horas antes del accidente en la Autovía de Utrera, el vehículo pasó por una zona de taller porque una de las ruedas estaba dando problemas.
Todo apunta a que la negligencia de un taller puede estar detrás principal causa del accidente. La principal hipótesis es que una de las llantas, que en teoría, era nueva, o estaba defectuosa, o en realidad, aunque en apariencia brillase,estaba usada y en mal estado. Esa llanta apunta a que podría tener una pequeña grieta y que como la llanta era muy grande y la rueda muy fina, en un bache, o con cualquier otra causa ajena a la conducción de Reyes mordió la goma e hizo estallar la rueda.
La Guardia Civil ha visitado talleres, han pedido facturas, y están recabando datos y haciendo nuevas gestiones.
Esto no es noticia deportiva, dejar a Reyes dep