Cuando iba a comenzar el partido una imagen llamó la atención de los sevillistas, los presentes en el estadio y los que seguían el partido de la Copa del Rey por televisión. El Sevilla FC vestía como local con sus medias rojas, una imagen inédita en el Ramón Sánchez-Pizjuán aunque habitual cuando juega lejos de Nervión.
Pues bien, el equipo sevillista ha cambiado su indumentaria habitual para hacerle un favor al Levante UD, su rival de este jueves en los dieciseisavos coperos.
El colegiado, José María Sánchez Martínez, pidió al equipo valenciano que se pusiera otras medias para no confundirlas con las sevillistas. Las calcetas levantinistas son azules oscuras y según el criterio del árbitro murciano debían ser cambiadas.
El Levante no había traído otras desde Valencia, pensando que no habría problemas, aunque cuando jugó en LaLiga Santander en el Sánchez-Pizjuán lo hizo con unas calcetas distintas, de rayas azules y grana, mientras que las que ha llevado este jueves son de un azul más oscuro incluso que el de su propia camiseta.
Ante esa tesitura, el Sevilla decidió cambiárselas y jugar con las rojas como local, una imagen inédita desde que en 2005 se cambiaran las medias blancas por las negras, un color que dio suerte a un equipo que desde la primera temporada en la que las retomó rompió su sequía de más de medio siglo sin ningún título.