¿Un equipo de balonmano? El sueño y la propuesta al Sevilla de Juan Andreu

Hay muchos aficionados del Sevilla FC repartidos por el mundo, pero pocos lo llevan tan a gala como Juan Andreu, el jugador internacional de balonmano que actualmente juega en el Limoges francés tras pasar por las mejores ligas de su deporte. El pivote es un habitual en Twitter, la red social en la que grita a los cuatro vientos su sevillismo.

El laureado deportista, de hecho, ha confirmado en una entrevista a la web oficial de la liga de balonmano francesa, la Pro Ligue, que su sueño es trabajar algún día para el Sevilla y, claro, ha usado también las redes sociales para hacerse una curiosa propuesta al club nervionense.

“Bueno, ¿qué Sevilla FC? ¿Nos sentamos para hablar de lo de hacer equipo de balonmano? No os preocupéis, que tengo mano en la RFEBM y en la ASOBAL”, ha publicado en Twitter el jugador que se formara en los equipos base del colegio de los Padres Blancos, en el barrio de Los Remedios.

A la iniciativa, de hecho, se ha sumado incluso en las redes la RFEBM. “No cabe duda, nos sumamos a la propuesta de Juan Andreu. Además, el Sevilla FC  ya tiene una camiseta de los #Hispanos... Ahí lo dejamos”, ha publicado.

Esta publicación viene a colación de su última respuesta en la citada entrevista, cuando al ser cuestionado por el final de su carrera, afirma que tiene claro cuál es su último objetivo por cumplir. "Para el final de mi carrera solo tengo un sueño: trabajar para el Sevilla FC".

El sevillismo exacerbado de Juan Andreu

En la curiosa entrevista a Juan Andreu publicada en la web oficial del campeonato balonmanístico francés, el Sevilla tiene muchísimo protagonismo, y en ella explica su sentimiento y, también, su rivalidad con el eterno rival. “Cuando apoyas al Sevilla, debes detestar al Betis, el otro equipo de la ciudad. Es un juego, pero en realidad no. Mis abuelos me llevaron al estadio cuando era pequeño, lo recuerdo muy bien. Y vuelvo siempre que puedo".

De hecho, explica Andreu que está haciendo todo lo posible para inculcar el sevillismo en sus hijos. “Si cambian de club, cambian de casa. Mi niño mayor ve los juegos conmigo, comienza a conocer a los jugadores, ¡trato de educarlo bien!", dice con guasa el sevillano, un embajador del sevillismo allá por dónde va.