El Sevilla FC ha vuelto este lunes a los entrenamientos. Lo hace no exento de polémica, tras la controversia que han generado las fotos de Lucas Ocampos, Banega, Franco Vázquez y Luuk de Jong, junto a demás amigos, saltándose la fase 2 de desescalada del coronavirus.
Así ha sido la vuelta de todos ellos a la Ciudad Deportiva Ramón Cisneros.
Todo arrancó este pasado sábado, cuando la esposa de Éver Banega compartió en las redes sociales una fotografía en la que se puede ver disfrutando de un arroz a varios jugadores sevillistas, así como a sus parejas.
En concreto, son Banega, Ocampos, Franco Vázquez y Luuk de Jong, que aparecían con sus esposas y con algunos amigos más. Las fotos corrieron como la pólvora por redes sociales, lo que obligó a los jugadores a pedir perdón públicamente.
Unas imágenes que han tenido la consecuente respuesta de Javier Tebas. En dicho comunicado, LaLiga comenta lo siguiente sobre la actuación de los futbolistas del Sevilla. "En las últimas horas hemos detectado que algunos jugadores han incumplido las normas sanitarias, reflejando tal incumplimiento en las redes sociales, denotando una relajación ante esta etapa final del camino. Estas actitudes son incomprensibles e inadmisables".
El organismo que preside Javier Tebas cree que cualquier tipo de actuación similar es peligrosa la reanudación de la competición. "Ponen en riesgo la finalización de la competición. Cualquier síntoma de relajación es una falta de respeto a LaLiga, a los clubes, jugadores y técnicos".