El fichaje de Marcos Acuña ha terminado por doblar todas las posiciones de la plantilla del Sevilla FC. A falta de los últimos retoques, y alguna posible oportunidad de mercado, Monchi cambia de tercio y se centra en la rampa de salida. Quizás el principal hándicap del pasado verano, en el que se concedieron demasiadas cesiones al no haber ofertas de peso por ninguno de los descartes.
Ahora Julen Lopetegui lo ha dejado claro desde el principio. Los futbolistas cedidos en la pasada temporada como Roque Mesa, Aleix Vidal, Gnagnon, Amadou y Corchia se han quedado en Sevilla y no entraron en la expedición que puso rumbo hacia Murcia. El club les comunicó que deben buscar equipo y que no cuentan para el técnico. Caso excepcional es el de Gnagnon, que sigue un plan específico y si se pone a tono podría tener una oportunidad tras su buen año en el Rennes.
Con Corchia se maneja que pueda salir con la carta de libertad bajo el brazo y rescindir su contrato para que pueda negociar libre. Roque Mesa tiene una oferta del Real Valladolid, que desea que rescinda y llegue a coste cero. Monchi quiere negociar y sacar algo por su salida, siendo Las Palmas otro de los que ha tanteado su situación.
Amadou sigue teniendo cartel en Francia pero el gran problema reside en su precio. El Sevilla no quiere dejarlo marchar gratis, puesto que costó casi 15 millones hace un par de temporadas. Aleix Vidal podría salir al Almería, aunque quiere seguir en LaLiga. También se le busca destino a Juan Soriano, pese a que ha viajado a Pinatar de Arena.
¿y el mudo vazquez? No me jodas que nos lo vamos a tener que comer otro añito mas, ese no esta ni para el coria