Lo que tiene que hacer el Sevilla en Krasnodar para clasificarse para octavos
La UEFA Champions League regresa tras un respiro de dos semanas y el Sevilla FC afronta de nuevo la máxima competición continental con la posibilidad de cerrar su pase a los octavos de final por la vía rápida.
El Sevilla acabó la primera vuelta del Grupo E con una trayectoria casi inmaculada, consiguiendo lo que se esperaba de él. Un empate ante el Chelsea en Londres y dos victorias seguidas en el Ramón Sánchez-Pizjuán ante los rivales más débiles le colocan con siete puntos en lo más alto, empatados con los londinenses, que son líderes por su mejor golaveraje hasta el momento.
Con estas cuentas, el Sevilla es uno de los seis equipos de la competición que podrían certificar esta semana su pase a los octavos de final, junto a clubes de la talla del Bayern de Múnich, el Liverpool, el Manchester City, el FC Barcelona y el propio Chelsea.
No depende de sí mismo para hacerlo en la cuarta jornada, pero visto lo visto en el grupo podría ser factible, ya que en estos momentos le saca seis puntos tanto al equipo ruso como al Rennes.
Si el Sevilla gana en Krasnodar asegurará, como mínimo, que en febrero va a seguir compitiendo en Europa, pues ya dejaría ‘eliminado’ al conjunto ruso y como mucho podría ser tercero. De conseguir los tres puntos, se clasificaría siempre que el Rennes no fuera capaz de ganar al Chelsea en Roazhon Park, ya que le sacaría como poco ocho puntos.
También aseguraría la tercera plaza el Sevilla si empatara ante el Krasnodar, y podría clasificarse si el Chelsea ganara en Francia, ya que le sacaría seis puntos al conjunto ruso y le ganaría el golaveraje particular, mientras que al Rennes le sacaría siete.
Si pierde todo se apretaría un poco, pero volvería a tener en la quinta jornada la posibilidad de clasificarse en el partido ante los ingleses en Nervión. Sea como fuere, el pase está encarrilado y sólo hace falta rubricarlo cuanto antes, algo que le vendría bien al equipo para vivir de forma más relajada el final del año, con una auténtica maratón de partidos por delante.