Jordán y Óliver no cambian el paso: autocrítica, sin quejas y a por la Copa

El Sevilla FC no suele pararse a lamentar y llorar. Primero porque la mayoría de las veces gana. Y segundo porque cuando le toca hincar la rodilla suele emplear un discurso de autocrítica más que de queja. Y eso hicieron los protagonistas del equipo nervionense tras la derrota ante el FC Barcelona. El mensaje institucional está clavado en la mente de todos los integrantes del vestuario. Empezando por Julen Lopetegui y continuando por hombres de referencia como Joan Jordán. "Estamos enfadados, pero toca centrar todas las energías en el miércoles, que es una cita muy importante para nosotros", explicó el catalán.

Sabe Jordán que el Sevilla FC no estuvo como en otras ocasiones y que el Barça jugó a un gran nivel. "He sentido que no hemos hecho lo que queríamos hacer, por lo que el FC Barcelona lo ha aprovechado. Queríamos ser agresivos, pero nos costó. Ellos estuvieron muy cómodos y no pudimos hacer mucho con el balón, nos costó", resumía el centrocampista. El gol le hizo mucho daño al Sevilla y lo reconoció el futbolista, que sabe que no podrán cometer el mismo error en el Camp Nou: "Ha sido más bien falta de convencimiento al apretar, al incomodarles. Tenemos que estar muy metidos en el partido del miércoles, nos hace una ilusión tremenda. Debemos ir todos a una para dar una imagen reconocible".

En la misma línea se mostró Óliver Torres. Ni uno ni otro quiso pararse un segundo en hablar del colegiado, que pudo expulsar a Leo Messi en la primera parte. "Tenemos que centrarnos en nosotros y corregir nuestros errores, pudimos interpretar mejor el partido. No podemos perder nuestra esencia, ir con ambición y ser protagonistas", dijo el extremeño. Jordán fue aún más categórico con la actuación de Hernández Hernández: "¿La segunda amarilla a Messi? No la sacó y ya está, no sé si es para amarilla o no, no hay nada que comentar".