La historia de Julen Lopetegui y Munir El-Haddadi describe una de esas tantas relaciones casi imposibles que existen en el fútbol. La del amor y el odio. Del ostracismo al protagonismo más absoluto. De la indiferencia al dulzor de los halagos. Un futbolista que se balancea entre altibajos, a veces cuestionado y muchas otras reclamado, aunque es innegable el bien que le hace al Sevilla FC.
Por mor del destino, en marzo su situación cambió. De repente dejó de entrar en los planes del técnico y acumuló 15 partidos sin salir de titular, jugando los minutos de la zozobra en un par de duelos. No fueron pocos los rumores de un supuesto encontronazo de Munir con el entrenador, incluidos unos enigmáticos mensajes en redes sociales que posteriormente borró. Una tesitura delicada que le invitó a buscar acomodo en el mercado estival, aunque finalmente decidió luchar por tratar de revertir su situación y convencer a Lopetegui de su valía para un club de élite.
Ese ostracismo no cambió un ápice con la entrada del nuevo curso y ha tenido que esperar tres meses casi en la grada para tener sus primeras oportunidades. En las últimas semanas ha sumado progresivamente protagonismo con el equipo, hasta el punto de dar un paso adelante, marcando ante el Levante, y que no sean pocos los que reclaman un rol mayor para el marroquí.
El derbi dejó una imagen curiosa. Al término del triunfo ante el Betis, Lopetegui se abrazó a Munir y ambos celebraron de forma efusiva la victoria, con un abrazo cómplice y una charla que sacó las sonrisas del delantero. Quién sabe si ese reencuentro se quedó en una anécdota o es la imagen del retorno, del 'perdón', la promesa de brindarle lo que se gana en los entrenamientos.
Lo cierto es que el Sevilla le necesita. Pocos futbolistas en la plantilla tienen más gol que Munir y más capacidad para dinamitar los partidos. Un jugador completo, con chispa y una capacidad innata para ver portería, que ya fue decisivo en la consecución de la última Europa League y que quiere volver a demostrar su valía con la elástica sevillista.
Es un buen futbolista y sería muy bueno el poder recuperar lo bueno que tiene en su fútbol. gusta mucho su puesta en el campo de fútbol es rápido tiene regate buen disparo se desmarca muy bien no es egoísta y tiene gol. Recuperado posiblemente el mejor fichaje que nesecita el Sevilla
Cuatro días después las criaturitas empiezan a reaparecer
a este le cogio asco como a Dabur, ahora se baja los pantalones porque sabe que está sin delanteros y este le puede sacar las castañas del fuego. Anda, Lope, que ya te has cargado a más de media docena de peloteros con tus manías, al final tu adorado De Jong mostró toda la gasma de carencias en el Barcelona ¿no no es tan bueno?.
Lo dicho, mas falso que una moneda de 2,50 euros.
Yo creo que nunca han tenido ningún problema extradeportivo. Simplemente Munir es muy buen segundo punta y eso no encaja en el esquema táctico de Lopetegui.