El entrenador del Wolfsburgo alemán, Florian Kohfeldt, lamentó en vísperas del partido de este martes de la UEFA Champions League, en el campo del Sevilla FC, la baja de última hora de su meta y capitán, el belga Koen Casteels, pero afirmó que, "en su lugar, jugará otro gran portero", el austríaco Pavao Pervan.
En la sala de prensa del estadio Ramón Sánchez-Pizjuán, Kohfeldt no quiso referirse este lunes a un posible brote de covid-19 en su plantilla, ya que "no es asunto" suyo, pues su "única responsabilidad es lo deportivo", aunque aseguró que sus jugadores tienen "mucho cuidado y cumplen las medidas" para evitar contagios "a rajatabla".
Sobre el choque frente al Sevilla, el técnico germano advirtió de que el equipo español "es muy intenso", "consigue recuperar pronto el balón y" posee "jugadores de mucha calidad, con un sistema de juego muy claro", aunque "también es flexible para cada momento", lo que obligará al Wolfsburgo a ser "muy rápido en ataque".
"Si queremos seguir en Champions, tenemos que lograr un buen resultado mañana, al menos un punto. Tenemos ilusión y poco que perder. El grupo está abierto; ellos y nosotros queremos seguir adelante. Puede que sean los favoritos, pero ahora tienen la presión de ganar", recalcó Florian Kohfeldt.
Por su parte, el centrocampista francés Joshua Guilavogui comentó que habló este pasado domingo con el portero Casteels, el capitán del cuadro alemán y que está en cuarentena por covid-19, y dijo que "está bien" aunque "para el equipo es una pena su baja".
El exjugador del Atlético de Madrid, que destacó la amistad que conseva de aquella época con el sevillista Yassine Bono, afirmó que "el Sevilla es un gran equipo" y que en el Wolfsburgo tendrán que "ser inteligentes" para neutralizar sus armas y llevarse algo positivo del Sánchez-Pizjuán.
"Tendremos enfrente a jugadores experimentados y a muchos aficionados, lo que supone un reto para nosotros. El Sevilla es uno de los mejores equipos de LaLiga", aseveró.