Es complicado defender el juego y el partido del Sevilla ante Osasuna. Si ganas, esta fórmula te sirve. Cuando no lo haces, hay que preparar el abrigo para taparse un poco. A todo eso se une la cara que se te queda cuando fallas un penalti en el último minuto, un regalo que te encuentras, y piensas que si quieres pelear LaLiga no se pueden desperdiciar estas oportunidades.
No es que el Sevilla generara poco, es que no generó. Tocar, tocar, tocar, tocar y todo muy horizontal. Solo 'Tecatito' ofreció verticalidad y la ocasión más clara del encuentro. Un recién llegado tuvo que asumir el peso del ataque del equipo.
Sin embargo, si eres candidato a LaLiga hay que ofrecer mucho más. Tienes que meter más en el campo, toda vez que presentas una convocatoria completa. Es cierto que se lesionan Ocampos y Montiel a las primeras de cambio, pero no es óbice para salir con otra predisposición.
La primera parte fue nula. La segunda, el equipo mejoró algo con los cambios y gozó de un par de ocasiones. Pero las sensaciones eran de ir a trompicones. Al final acabas metiendo a Osasuna en su campo porque ellos se conforman con el punto y tú tienes más calidad, mucha más calidad.
Osasuna comenzó a realizar cambios para asentar el empate. Metió a varios chavales y ni aún así fue capaz del Sevilla de estar cómodo en el partido.
Sin embargo, el Sevilla la tuvo en el último minuto con un penalti, justo, que se encontró en una acción aislada. Una pena máxima de VAR claramente. En el fútbol de toda la vida, eso no se pita en la vida.
Rakitic, un especialista, se colocó en el punto de penalti sabiendo que su posible gol metería de lleno al Sevilla en la pelea por LaLiga. Se le hizo de noche, algo raro en él. Lanzó mal, al lado natural, a media altura y Herrera lo detuvo.
Se quedó el Sevilla en shock, con la cara descompuesta y volviendo a perder dos puntos más.
Este empate sabe a muy poco. Un equipo como el Sevilla, si quiere aspirar a LaLiga, sus opciones residen en estos partidos. Pamplona es un campo complejo, intenso y racial. No obstante, hay que ofrecer más. Cuando solo 'Tecatito' es el destacado, algo mal se ha hecho durante los 90 minutos. El penalti es una gran anécdota del partido. Sin embargo, no hay que olvidar el mal partido del Sevilla en líneas generales.
Lo único positivo que se puede sacar del partido es que el empate sabe a derrota. Eso habla claramente de la ambición del Sevilla de ir a por LaLiga. Esa mentalidad, esa sensación de oportunidad pérdida, es lo mejor que se puede llevar el Sevilla de Pamplona.
mi humilde opinion de aficionado de base es que se salto al campo sin ambicion, sin tension, vamos a entrená mas o menos y para conseguir algo hay que echar mas carne en el asador y el Sevilla no puso ni las pastillas para el fuego y asi dificilmente se puede conseguir algo, mas coones le echaron los navarros a pesar de saberse inferiores que los sevillistas y así si vamos a la Uefa seráun milagro y de la liga ni hablemos.
Estupenda crónica por parte de este periodista. Solo un inciso, como éste partido, el Sevilla lleva perpetrado no se cuántos partidos y años. Hay que ser más objetivos y decir también cuando gana de está manera que así no se va a ningún lado.