Kike Salas cumple su palabra. El central del Sevilla FC, tras acumular minutos con Julen Lopetegui, volvió a jugar este fin de semana con el Sevilla Atlético y, tal y como prometió en su última entrevista, no diferenció entre un lado y otro: de pelear con los delanteros del Dortmund a marcar ante el Antequera.
No es nada sencillo. Kike Salas ha pasado, desde que se marchase Lopetegui y llegase Sampaoli, de ser el central titular del Sevilla a no jugar ni un solo minuto con el primer equipo.
Podía suceder y este fin de semana fue la confirmación de la pérdida de protagonismo. Con Marcao y Nianzou en su mejor momento, Kike Salas volvió a jugar este fin de semana con el Sevilla Atlético... y también cumplió.
"Mi ilusión era esta, es una alegría enorme, pero sé cual es mi sitio. Yo trabajo para el club y tengo que estar preparado mentalmente si bajo al filial para seguir rindiendo al mismo nivel", decía tras el parón internacional en una entrevista para Onda Cero. Y Kike Salas cumplió su palabra.
Este domingo, ante el Antequera, el zaguero consiguió anotar el tanto de su equipo y, en el último suspiro, tuvo una segunda oportunidad para poner el empate en el marcardo.
Mientras Carmona parece asentarse en el primer equipo, Kike Salas ya ha tenido que bajar un escalón para volver con el filial. Pero él sigue rindiendo. Sigue luchando por tener una oportunidad que, con Sampaoli, con tres centrales habitualmente sobre el césped, es probable que vuelva muy pronto.
Por el momento, cumple su palabra.