No hay espacio para la sonrisa en el Sevilla FC. Tras la victoria ante el Copenhague, los de Jorge Sampaoli disfrutaban de una oportunidad idónea para ganar en el Sánchez-Pizjuán y alargar la buena racha antes del derbi, pero la caída ante el Rayo Vallecano dolío (y mucho).
En máximo silencio, sin sonrisa alguna, sin abrazos ni ánimos. Los jugadores del Sevilla fueron llegando, tras Sampaoli, uno a uno al vestuario sin ganas de hacer amigos.
Caras largas y un silencio sepulcral: dale al play superior de la noticia y descubre cómo llegaron los futbolistas al vestuario. Si prefieres ver el Inside del Sevilla completo, puedes hacerlo aquí.
La cara es la de Sampaoli diciendo donde me he metido, esta gente están en Segunda ya, pero no me extrañaría que pegara la Espanta cogiera las maletas y se largara antes de Navidad, como le pinten la cara en el VILLAMARÍN ESTE SE VA.