El último baile tendrá que esperar

Joaquín y Jesús, Sánchez y Navas. No importa cómo les llames en Sevilla, todos saben quiénes son, todos saben la importancia que tienen, todos saben la increíble carrera que completan y todos saben, a pocas horas del encuentro de este domingo (21.00 horas) que el último baile entre ambos tendrá que esperar un poco más.

Amenazando lleva el balón con retirarles desde hace años. Joaquín Sánchez parecía terminar contrato el pasado verano y Jesús Navas, tras una temporada llena de lesiones, parecía no estar para seguir compitiendo. Y aquí siguen los dos.

El extremo del Real Betis, últimamente mucho más cómodo en la mediapunta, vivirá el derbi desde la grada tras su última lesión, aunque nadie duda de que será la voz cantante en la previa del encuentro. Nadie en el equipo entiende los derbis como él.

Por su lado, el ahora carrilero del Sevilla FC tampoco tiene ni mucho menos garantizada su titularidad. Con molestias desde hace semanas, Navas ha tenido que ceder su sitio a Montiel que, sin estar brillante, acumula minutos bajo el mandato de Sampaoli.

Las dos leyendas, una bética y otra sevillista, no se podrán encontrar este domingo (al menos en el césped), por lo que será en el encuentro de vuelta, en el Sánchez-Pizjuán, en el que podría vivirse el último baile entre ambos.

El último si es que quieren. Porque Joaquín (41 años) ya ha dejado claro que si su equipo acaba en Champions se apunta a una temporada más y Navas (36) probablemente no abandonará el equipo de su vida -tiene contrato hasta 2024- antes de que la situación vuelva a la normalidad.

Por el momento, aún queda por disfrutar de la magia, del sacrificio, de la inteligencia y la entrega de dos de los mejores jugadores que han vestido las dos camisetas. El último baile, por el momento, tendrá que esperar.