Del Cerro y el Sevilla: 40 partidos, el cuarto equipo con más rojas y un montón de polémicas

El Sevilla FC y Carlos Del Cerro Grande comenzaron a encontrarse en un terreno de juego en septiembre de 2011 y, 40 partidos después, la relación entre ambos está llena de polémicas. Pocos sevillistas no tienen señalado al colegiado madrileño como uno de los que más ha perjudicado a su equipo en los últimos años, y ese sambenito no se lo va a quitar, ni mucho menos, este miércoles.

Sólo en la primera mitad del partido ante la Real Sociedad, Del Cerro Grande ha expulsado a dos jugadores del Sevilla -Rakitic y Nianzou-, ha validado un gol de Brais Méndez en el que Silva, en fuera de juego, influye en la jugada, y ha dejado pasar sin amarilla un manotazo de Diego Rico a Óliver Torres que, incluso, podría haber sido roja atendiendo a los criterios de algunos colegiados.

No es sino el último ejemplo de un rosario de partidos en el que el Sevilla se ha sentido perjudicado. En la memoria sevillista queda aquel derbi de la temporada 2012/13 en el que ganaban por 0-3 en Heliópolis. El de Alcalá de Henares expulsó a Medel y señaló un penalti extrañísimo de Fazio, descolocando a un equipo que controlaba un partido que acabó empatando.

Tampoco es la primera vez que expulsa a dos jugadores del Sevilla. Lo hizo en la final de la Copa del Rey de 2016, en el Vicente Calderón. El partido acabó con 0-0, pero Banega fue expulsado poco antes del final y Carriço en la prórroga. El FC Barcelona aprovechó la circunstancia y ganó 3-0. El pasado ejercicio, en el partido ante los culés en Nervión, también expulsó a Koundé tras darle un balonazo a un Jordi Alba que le había provocado antes y se fue de rositas. Con las dos de este miércoles, el nervionense es el tercer equipo que ha sufrido más expulsiones por parte del madrileño, con seis en total. Sólo Elche, Málaga y Cádiz tienen más.

Incluso en esta temporada también ha tenido el Sevilla polémica con Del Cerro Grande. En la jornada 1, pitó un penalti extrañísimo del Papu Gómez en Pamplona que le dio al Osasuna la posibilidad de ganar por 2-1. El argentino soltó el brazo saliendo del área, no con mucha intensidad, pero lo suficiente para que el madrileño decretara penalti y le sacara tarjeta, lo que no ha hecho este miércoles con Diego Rico y su manotazo a Óliver. Aquella decisión -en la que no consultó con el VAR- fue comentada en todos los foros, rectificada por el Comité Técnico de Árbitros e incluso le sirvió para entrar en la nevera y no pitar durante algunas jornadas.