El Sevilla FC de la temporada 2022/23 tiene muchas carencias en casi todas las líneas, pero sí mantiene una de ellas a un nivel enorme. Es el caso de la portería, cubierta a la perfección por dos guardametas de categoría como Yassine Bono y Marko Dmitrovic. En los partidos que ha tenido que jugar el serbio, bien por problemas físicos del marroquí, o bien por decisión técnica, se ha corroborado que el equipo nervionense cuenta con dos porteros de máxima garantía. No en vano, los dos son internacionales y mundialistas.
Este jueves, Sampaoli decidió darle de nuevo la titularidad a Dmitrovic en el partido ante el Fenerbahçe, dando continuidad a su partido de hace dos semanas en Eindhoven, cuando tuvo que entrar a última hora en el once debido a una indisposición de Bono, y el balcánico le dio la razón. Fue el que sostuvo al equipo en su mala primera parte, con varias intervenciones de mérito como un mano a mano ante Joshua King, una impresionante mano que evitó un remate de cabeza franco de Enner Valencia o un disparo raso del ecuatoriano que sacó con las piernas de manera poco ortodoxa.
En total, el ex del Éibar hizo cinco paradas, alcanzando el Fenerbahçe la cifra de 12 ocasiones de gol, firmando una actuación que le hizo ganarse la felicitación de sus compañeros sobre el césped y del entrenador en la rueda de prensa. “Tenemos dos grandes porteros y por eso tiene la posibilidad de jugar y hacerlo bien”, indicó Sampaoli en la rueda de prensa. Pero la felicitación más especial fue la de Bono, que nada más acabar el partido se apresuró a abrazar a su compañero y rival por un puesto bajo el arco.
Dmitrovic suma 12 partidos en lo que va de temporada, repartidos en tres de LaLiga, cinco de la Copa del Rey, dos de la Champions League y otros dos de la Europa League, competición en la que parece que se ha hecho con el puesto de titular. Solo ha encajado cinco goles, y ha conseguido mantener la portería a cero en ocho encuentros. Unos números que hablan claro de su gran capacidad.
El de Subotica tiene contrato con el Sevilla hasta 2025, y es una seguridad para el club tenerle amarrado de cara al futuro, pues no es descartable que Yassine Bono acabe saliendo este verano. El marroquí, uno de los mejores porteros del mundo tal y como reflejó la FIFA en sus premios The Best, ya ha tenido ofertas, aunque decidió no salir en invierno, pero todo hace indicar que volverán a por él cuando acabe la vigente temporada. Por si acaso, ahí está Dmitrovic.